En una inusual declaración, las Fuerzas de Defensa de Israel expresaron el martes su pesar por la muerte de un soldado libanés durante el ataque a un objetivo vinculado a Hezbolá.

La frontera entre Líbano e Israel ha sido testigo de una intensificación de los intercambios de disparos desde que estalló la guerra en Gaza entre Hamás e Israel el 7 de octubre, y las fuerzas israelíes respondieron a ataques que han involucrado principalmente a Hezbolá.

“Una posición militar del ejército en… la zona de Adaysseh fue bombardeada por el enemigo israelí, dejando a un soldado mártir y otros tres heridos”, dijo el ejército libanés en un comunicado.

Según las FDI, las fuerzas israelíes “estaban trabajando para neutralizar una amenaza tangible que fue identificada” en un puesto de lanzamiento y observación de Hezbolá a lo largo de la frontera.

“Las FDI recibieron un informe de que varios soldados del ejército del Líbano resultaron heridos durante el ataque. Las fuerzas del ejército libanés no fueron el objetivo del ataque”, dice el comunicado. “Las FDI lamentan el incidente y será investigado”.

Al comentar sobre la muerte del soldado libanés, la misión de mantenimiento de la paz de la ONU (FPNUL) dijo en un comunicado: “Las Fuerzas Armadas Libanesas no han entrado en conflicto con Israel.

“Durante los últimos días, hemos visto un aumento rápido y alarmante de la violencia”, añadió la FPNUL, instando a poner fin “al ciclo de violencia, que podría tener consecuencias devastadoras para las personas de ambos lados”.

La frontera norte de Israel con el Líbano se ha calentado significativamente desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamás, y Hezbolá busca inmovilizar tropas con un flujo constante de enfrentamientos y ataques de bajo nivel.

Desde que comenzaron los intercambios transfronterizos, más de 110 personas han muerto en el lado libanés, en su mayoría combatientes de Hezbolá y más de una docena de civiles, según un recuento de la AFP.

Hezbolá ha dicho que 79 de sus miembros han sido asesinados desde que estalló la guerra en el sur del Líbano.

Del lado israelí, 6 soldados y 3 civiles han muerto.

Los combates han desplazado a decenas de miles de comunidades del norte de Israel, que han sido azotadas por el lanzamiento de cohetes y bombardeos llevados a cabo por Hezbolá y grupos palestinos aliados.

Israel lanzó su guerra contra Hamás en Gaza después de que miles de terroristas se infiltraran en el sur de Israel el 7 de octubre, masacrando a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomando unos 240 rehenes.

Los intercambios diarios de disparos y ataques con Hezbolá, Hamás y otros grupos terroristas han generado temores de una conflagración más amplia.

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