Diego Sciretta informa desde la frontera Israel- Gaza.
“Estamos en el paso Erez, en lo que es la única entrada y salida de provisiones para la Franja de Gaza, mientras sentimos el fuego del combate que se está dando aquí en el norte.
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Este lugar de la franja de Gaza era un símbolo de la coexistencia hace solo tres meses atrás- por aquí salían 27.000 palestinos a trabajar en Israel- se transformó desde el día 7 de octubre en los portones del infierno.
Desde aquí salieron los 3000 terroristas palestinos atacar 22 kibutz(im), asesinar 1200 civiles y a secuestrar a más de 250 personas, de las cuales 140 aprox todavía están en cautiverio.
Desde ayer, comenzó una especie de resistencia civil que intenta intenta terminar con con el apoyo y la entrada de comida a Gaza hasta que los secuestrados israelíes no reciban todo tipo de atención humanitaria que la ley internacional manda a Hamás.
En este momento estamos en una situación donde un Estado que se le exige internacionalmente cumplir con todos los derechos y las leyes internacionales, se enfrenta a una organización terrorista, organización terrorista que no cumple y viola absolutamente y comete crímenes de lesa humanidad.
En el mundo aún hay gente que apoya a la ultraderecha islámica y a esta gente que viola la ley internacional y está de paso en la frontera de la Franja de Gaza e Israel. Aquí aún vemos los restos de lo que fue el puesto de guardia.
Agradecemos al ejército israelí que nos abrió la posibilidad de pasar”.
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