Un beduino residente del Néguev que salvó a varios soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel durante la masacre de Hamás del 7 de octubre en el sur de Israel recibe plenos derechos de residencia en Israel.

Hamid Abu Ar’ar, padre de nueve hijos, se puso heroicamente en la línea de fuego para salvar a los soldados de una emboscada terrorista poco después de que su esposa Fátima fuera asesinada delante de él y su bebé el 7 de octubre, informó The Times of Israel.

Abu Ar’ar nació en la Franja de Gaza y por lo tanto no tenía estatus permanente en Israel, informa el Canal 13.

“Aparte de la guerra intransigente contra el terrorismo, debemos fortalecer a quienes muestran lealtad y eligen la vida”, dice el ministro del Interior, Moshe Arbel, después de tomar la decisión de conceder el estatus permanente a Abu Ar’ar.

La historia de Abu Ar’ar del 7 de octubre se puede ver en el vídeo a continuación.

Abu Ar’ar no fue el único beduino que mostró una conducta ejemplar el 7 de octubre. Youssef Ziadna, conductor de minibús beduino israelí, salvó a 30 personas de la masacre rave en el Néguev. Ese día lo llamaron para recoger a uno de sus clientes habituales y terminó rescatando a 30 personas, todos judíos israelíes, de la masacre en la fiesta al aire libre cerca de la frontera sur de Israel, esquivando balas y desviándose del camino para llevarlos a un lugar seguro.

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