El ministro Benny Gantz, respondió a la votación de hoy del Consejo de Seguridad de la ONU, en la que se negó a exigir la devolución de los rehenes y Estados Unidos se negó a imponer su veto contra la resolución, informó Arutz Sheva.
Como resultado, el primer ministro Netanyahu declaró que canceló la delegación que estaba prevista para mantener conversaciones en Washington sobre la esperada ofensiva terrestre en Rafah.
“Israel tiene la obligación moral de continuar la guerra hasta que se hayan recuperado los rehenes y se haya eliminado la amenaza de Hamás, y así lo hará. La decisión del Consejo de Seguridad no tiene ningún significado operativo para nosotros y, en cualquier caso, seguiremos escuchando a nuestros aliados y haremos lo mejor para la seguridad de Israel”.
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”Junto con esto, es importante recordar que nuestra relación única con los Estados Unidos de América es un ancla diplomática y de seguridad para Israel, y el discurso directo con el gobierno estadounidense es un activo vital al que no podemos renunciar incluso cuando hay desafíos. o desacuerdos.
“Estados Unidos hizo bien en aclarar que un alto el fuego requeriría como condición previa la liberación de los rehenes. El Ministro de Defensa hizo bien en ir a Estados Unidos y discutirá con altos funcionarios de la administración estadounidense sobre las cuestiones políticas y de seguridad en cuestión y nuestra necesidad de que la guerra continúe”.
“Sería mejor que no sólo se enviara la delegación según lo planeado, sino que el primer ministro fuera él mismo a Estados Unidos y hablara directamente con el presidente Biden y altos funcionarios de la administración”.
La Oficina del Primer Ministro respondió a Gantz: “Después de que Hamás acogiera con agrado la decisión del Consejo de Seguridad que se aprobó mediante la abstención de Estados Unidos, Gantz propone que una delegación visite Estados Unidos. El primer ministro ha rechazado su propuesta”.
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