Hezbolá lanzó tres proyectiles desde el Líbano y alcanzaron una bodega israelí en Avivim, una medida que ha intensificado las tensiones en la frontera entre el norte de Israel y el Líbano. Este incidente, según las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), es un ataque directo contra estructuras civiles, y Hezbolá afirma que el sitio objetivo era utilizado por las fuerzas israelíes. Sin embargo, no se reportaron víctimas y la comunidad había sido evacuada en gran medida antes del ataque, lo que evitó posibles pérdidas de vidas, informó BNN.
Escalada en el Norte
Las FDI respondieron rápidamente a la agresión bombardeando el sitio de lanzamiento en el sur del Líbano, lo que marcó un repunte significativo en las ya tensas relaciones entre Israel y Hezbolá. El propietario de la bodega atacada le contó a Ynet la pesadilla recurrente de que su negocio fuera atacado, marcando este como el cuarto incidente de este tipo. Los patrones históricos muestran que la estrategia de Hezbolá incluye atacar la infraestructura civil israelí, intentar instigar el miedo y perturbar la vida cotidiana, una táctica que ha experimentado un aumento significativo en marzo de 2024.
La creciente amenaza de Hezbolá
El arsenal de Hezbolá, como lo detallan los expertos en seguridad, plantea una amenaza sustancial al panorama de seguridad de Israel. Con más de 140.000 cohetes de corto alcance a su disposición, 65.000 de los cuales son capaces de alcanzar las principales ciudades israelíes como Haifa, el potencial de una devastación generalizada es alarmantemente alto. Los recientes ataques subrayan la volátil situación en la frontera y la necesidad de una mayor vigilancia entre las comunidades israelíes. Además, la evacuación de miles de personas cerca de las fronteras del Líbano y Gaza pone de relieve la gravedad de la amenaza percibida y las medidas de precaución que está adoptando el gobierno israelí.
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Resiliencia comunitaria en medio del miedo
Los civiles en las regiones del norte de Israel, particularmente aquellos en comunidades cercanas a la frontera libanesa, han estado viviendo bajo la sombra de las amenazas de Hezbolá. A pesar del miedo y la incertidumbre, hay una sensación palpable de resiliencia entre los residentes. Los repetidos ataques contra infraestructura civil, como la bodega Avivim, no sólo han perturbado las operaciones comerciales sino que también han sacado a la luz el espíritu indomable de las comunidades israelíes frente a la adversidad. Sin embargo, la amenaza continua requiere una evaluación continua de las medidas de seguridad para proteger a estas comunidades vulnerables.
Los proyectiles fueron lanzados hacia la Unidad de Control Aéreo de las FDI en el área de Meron en el norte de Israel, dijo el ejército el martes.
No se reportaron víctimas y el evento no obstruyó las actividades operativas, señalaron las FDI.
El ejército detectó tres lanzamientos hacia Avivim, que no provocaron víctimas, y dijo que había disparado contra el origen de los lanzamientos de cohetes de Hezbolá.
Bodega muy dañada
Más temprano el martes, los medios israelíes informaron que la bodega resultó gravemente dañada en Avivim, en el norte de Israel, como resultado de un misil antitanque, según The Jerusalem Post.
Dos equipos de Bomberos y Rescate de Israel estaban operando en el lugar, dijo la Autoridad Nacional.
La organización de noticias libanesa Al-Mayadeen, afiliada a Hezbolá, citando a la organización terrorista, informó que esta afirmó haber atacado dos edificios en Avivim en respuesta a las actividades militares de Israel en el sur del Líbano.
Según el informe de Al-Mayadeen, Hezbolá dijo que los soldados israelíes utilizaban los edificios que había atacado.
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