AJN

17 de junio- El diario semanal alemán Der Spiegel basó su reporte en un archivo de 2.000 páginas compilado por autoridades de Berlín y lo publicó cerca de 40 años después del ataque a las Olimpíadas del verano de ese año que terminó con la muerte de once atletas israelíes.

Activistas neo nazis ayudaron a los terroristas palestinos que perpetraron la masacre de los atletas israelíes durante las Olimpíadas de Munich de 1972, según informó el diario semanal alemán Der Spiegel hoy.
El reporte se basó en un archivo de 2.000 páginas compilado por la Oficina Federal para la Protección de la Constitución, el cual se publicó debido al pedido de Der Spiegel, cerca del 40º aniversario de la masacre de Munich, el cual se cumplirá en septiembre.
En las Olimpíadas de Munich en el verano de 1972, terroristas de la organización Septiembre Negro de Fatah secuestraron a miembros del equipo olímpico de Israel. Dos de los atletas israelíes fueron asesinados en seguida y otros nueve murieron en un fallido intento de rescate alemán en el aeropuerto de Munich.

Un documento dado a conocer hoy, que detalla la correspondencia entre la policía local de Dortmund y la Oficina Federal para la Protección de la Constitución, revela que siete semanas antes del ataque un hombre llamado Saad Walli, aparentemente “de apariencia árabe”, según lo descrito, tuvo un encuentro sospechoso con un activista neo nazi llamado Willi Pohl.

Saad Walli era el alias de Abu Daoud, uno de los líderes de Septiembre Negro y organizador del ataque de Munich, y murió en Damasco hace dos años.
Las nuevas cartas reveladas no indican que las fuerzas de seguridad federales alemanas y la Oficina Federal para la Protección de la Constitución actuaran en ningún modo para arrestar a Abu Daoud, a pesar de tener información preliminar.

Según Der Spiegel, el activista neo nazi ayudó a Daoud a obtener credenciales falsas, incluyendo pasaportes y otros documentos. Además se lo citó diciendo que llevó “a Daoud de paseo por Alemania donde se encontró con palestinos en varias ciudades”.

Actualmente, Pohl vive de escribir novelas policiales, usando diferentes nombres, e indica que “sin saberlo” estuvo conectado con “los perpetradores de la masacre de las Olimpíadas”.

Se informó que el activista alemán también estaba vinculado con el seguimiento del ataque planeado por los militantes palestinos luego de la masacre de Munich. Siguiendo instrucciones e Abu Jihad, el entonces segundo de Yasser Arafat y segundo en comando de Fatah, Pohl iba a planear un secuestro en la catedral Koln y en los municipios de varias ciudades importantes de Alemania.

Sin embargo fue arrestado en Munich con granadas y armas de fuego en su posesión en octubre de 1972. También se encontró que tenía una carta amenazante que iba a ser enviada a un juez alemán que había estado a cargo del juicio de los tres planeadores del ataque.