JOSÉ KAMINER TAUBER PARA ENLACE JUDÍO

Tisha b’Av (en hebreo תשעה באב, tishā b´av) es el principal día de ayuno y abstinencia del judaísmo de origen rabínico. Su nombre hace referencia al noveno día del mes hebreo de av, que cae en la canícula. Se le suele llamar el “día más triste en la historia judía’’.

El nueve de Av ha sido considerado como un día de tribulación, muchos de los terribles acontecimientos ocurrieron o se iniciaron en este día en la historia judía, tradicionalmente se conmemora la destrucción del Primer Templo, edificado por el rey Salomón, por el ejercito de Nabucodonosor; la destrucción del segundo Templo por Tito el hijo de Vespacianus, la caída de Betar (que indica el colapso en la rebelión de Bar Kojba seguido por la intensa persecución conducida por Adriano), la expulsión de los judíos de Inglaterra por el Rey Eduardo I, la expulsión de los judíos de Francia, y el destierro de los judíos de España por el rey Fernando y la reina Isabel en 1492.

Entre Posteriores calamidades del 9 de Av encontramos el inició de la Primera Guerra Mundial en 1914, la inauguración del Campo de exterminio de Treblinka, inauguración y las primeras muertes en 1942 y la muerte de 85 personas y más de 120 heridos en el atentado a la AMIA (Asociación Mutua Israelita Argentina) por un grupo islámico terrorista el 18 de julio de 1994 en Buenos Aires.

Además de ayunar, durante Tisha Be Av los judíos observantes deben de abstenerse de lavar, trabajar, beber, usar la electricidad, las compras y tener relaciones sexuales.

Según algunos Judíos ortodoxos creen que Tisha B’av seguirá siendo un día de luto hasta que llegue el Mesías y se logre la reconstrucción del templo en Jerusalén.

Dice el Talmud (Ta´anit 29b) El siete de ab los romanos ingresaron al santuario y el nueve, al atardecer, comenzaron a quemarlo y continuó ardiendo todo el día siguiente, o sea hasta el diez de ab. Por ello, Rabí Yojanan afirma en el citado párrafo del Talmud que de haber vivido en aquella generación hubiese establecido el ayuno el diez de ab, sin embargo los sabios que lo instituyeron el nueve, sostienen que el comienzo de la tragedia es determinante.

Los judíos de hoy pueden darse cuenta de lo afortunados que son en comparación con sus antepasados, que fueron víctimas de la persecución étnica y religiosa. Aunque el antisemitismo está en aumento hoy en día, los judíos no son perseguidos en la misma medida como lo fueron en la historia.

Aceptar un acuerdo con el desastre nunca ha sido fácil. No hay pueblo o religión que haya tenido una experiencia como el pueblo judío tuvo, los judíos han encontrado una manera de sobrevivir e incluso prosperar. El pueblo judío encontró una manera de convertir el desastre en supervivencia de una nueva realidad.