JOSÉ KAMINER TAUBER PARA ENLACE JUDÍO

Armonizando su imagen en el reflejo de sus canales,
la ciudad de torres y agujas se retrata diariamente,
engalanada con los blancos alfeizares de los ventanales
de casas y almacenes alargados con variados colores.
Parecen bailar con el trajín de sus puentes y vías acuosas,
mientras se disfruta una buena cerveza y se compra queso.

Ámsterdam, la ciudad

Ámsterdam (del neerlandés Amsterdam, [ɑmstər’dɑm]) es conocida coloquialmente como la Venecia del norte. surgió como todas las ciudades que a lo largo de la historia se han desarrollado a la orilla del mar, de un pequeño pueblo de pescadores en el siglo XII, la construcción de un dique (dam) sobre el río Amstel dio nombre al poblado allí asentado: Amsteldam.

Durante el siglo XVII, se convierte en una de las ciudades más ricas del mundo. Su rápido auge económico y crecimiento la hicieron muy próspera para los comerciantes de Ámsterdam, que tenían en esa época, la mayor participación de la Compañía Holandesa de las Indias Orientales.

También el siglo XVII se denomina el Primer Siglo de Oro de Ámsterdam. En ese tiempo se edificó el Ayuntamiento de la Plaza de Dam y el centro histórico de la ciudad fue construido en gran parte.

En aquel periodo se construyeron varios canales semicirculares alrededor del casco antiguo de la ciudad. Después se urbanizaron las nuevas calles que ahora habían sido hechas con casas y almacenes en estilo típico holandés que es una de las imágenes más famosas de Ámsterdam y del país.

Ámsterdam se convirtió en la residencia de intelectuales y artistas que escapaban de las guerras que asolaban el resto de Europa, entre los que se refugiaron en la próspera ciudad encontramos a Rembrandt, Spinoza, Descartes
Para finales del siglo XVII, los Países Bajos comenzaron a perder poder y el control de sus colonias; Ámsterdam, además, perdió su poder político surgiendo el de La Haya.

Rembrandt y los judíos

Rembrandt Harmenszoon van Rijn, conocido como Rembrandt, nació en la cd. de Leiden, Holanda el 15 de julio de 1606. Fue el noveno hijo del matrimonio formado por Harmen Gerritszoon van Rijn y Neeltgen Willemsdochter van Zuytbrouck, en el seno de una acomodada familia de molineros. Rembrandt recibió una esmerada educación y llegó a ingresar en la Universidad de Leiden, donde estudió un curso, se desconoce en qué materias, ya para entonces se decidió por la pintura.

Ya para el año de 1630, el claroscuro se convierte en el más poderoso medio de su expresión como pintor, tal como se observa en obras como Sansón traicionado por Dalila y La presentación de Jesús en el templo.

A finales del año 1631, Rembrandt se mudó a Ámsterdam, la capital de negocios del país, que crecía vertiginosamente gracias al comercio. Rembrandt empezó a trabajar como retratista profesional de creciente éxito.
Rembrandt residía desde 1639 en la Sint Anthonisbeestrat (hoy Jodenbeestraat), en el barrio judío portugués, donde se había abierto ese mismo año una sinagoga.

Los judíos habitaban de acuerdo con la historia documenta a partir del, siglo XVI entre otros, buscaban refugio en Amsterdam, los judíos sefardíes y los hugonotes de Francia, que eran perseguidos por motivos religiosos. Hoy probablemente la amalgama y tipología de estos holandeses es amplia.

Rembrandt tenía amigos y conocidos judíos como el rabino Manasés ben Israel, que habitaba en la misma cuadra que el. Rembrandt lo retrató en 1636 (W.B. 269) e ilustró uno de sus libros en 1655.

Podemos decir que su relación que tenía con los judíos que en el Amsterdan del siglo XVII, la población sefardí se estableció en la ciudad. Allí vivió el pintor y absorbió parte de la cultura judía. Una cercanía que materializó en sus obras e hizo escenas ambientadas del Antiguo Testamento, en las que plasmaba textos en hebreo y sus personajes tenían características judías.

Según ciertos catálogos del siglo XX, casi un tercio de las obras de Rembrandt tiene una relación con los judíos, “por la representación de israelitas, en su obra para las cuales pudo haber utilizado modelos de este credo”, explica Eduard van Voolen.

La novia judía (en holandés: Het Joodse bruidje) es una obra del pintor pintada en el año 1666. Está expuesta en forma permanente en el Rijks museum de Ámsterdam. Los colores que sobresalen son amarillos, verdes, marrones, negros y sobre todo el que más destaca es el rojo del vestido de la mujer.

A la pintura se le dio el nombre actual a principios del siglo XIX, cuando un coleccionista de arte de Ámsterdam identificó el tema como el de un padre judío que regala un collar a su hija el día de su casamiento. Esta interpretación ya no es aceptada, y la identidad de la pareja es incierta.

Entre las especulaciones en relación a la identidad de la pareja se ha considerado la posibilidad de que fuesen parejas del Antiguo Testamento, incluyendo Abraham y Sara, o Boaz y Rut. La identificación más probable es la de Isaac y Rebeca como son descritos en el Génesis.

En el lienzo aparecen un hombre en la izquierda y una mujer joven a la derecha. Ellos están vestidos con ropas que muestran que son de la clase alta.

El hombre abraza a la joven con su brazo alrededor del hombro y con la otra mano, la más visible, toca suavemente el pecho de ella. Mientras, la mujer le toma su mano de forma cariñosa. Ella luce muchas joyas que adornan su vestimenta como pendientes, un collar, pulseras y anillos.

Rembrandt muere en Amsterdam el 4 de octubre de 1669 a la edad de 63 años, siendo uno de los más innovadores y excepcionales artistas de todos los tiempos.