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16 de septiembre 2012.-El Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, exhortó hoy a los estadounidenses a que elijan un Presidente dispuesto a ponerle límites a Irán, al tiempo que comparó el programa nuclear de Teherán con el atentado en Oklahoma City y le recordó a los electores de las repercusiones devastadoras de unos fallidos servicios de espionaje.
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Las afirmaciones, que cuestionaron la política exterior del Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, fueron hechas en entrevistas con CNN y NBC a menos de mes y medio de las elecciones presidenciales.
“Es como si Timothy McVeigh (el terrorista del atentado en Oklahoma) entrara a una tienda en Oklahoma City y dijera: ‘Quiero cuidar mi jardín y quisiera comprar un poco de fertilizante (usado como ingrediente en artefactos explosivos)…’Vamos. Sabemos que están trabajando en un arma”, afirmó Netanyahu en referencia a Irán.
En las últimas semanas el líder israelí ha abogado por implementar medidas más drásticas en contra de Irán que incluyan acciones militares, sin embargo la comunidad internacional, encabezada por Estados Unidos, ha rechazado la propuesta inclinándose por la vía diplomática.
Por su parte, medios locales condenaron las declaraciones de Netanyahu al decir que para él parece más importante derrocar a Obama que al Presidente Iraní, Mahmoud Ahmadineyad.
Para la mayoría de los analistas, más allá de su retórica bélica, Netanyahu quiere conseguir de Obama las máximas concesiones posibles antes de las elecciones estadounidenses, jugando con el peso del electorado judío.
Cualquier desplazamiento de este sector, tradicionalmente demócrata, podría ser determinante, como lo fue cuando George W. Bush ganó por muy poco las elecciones en el 2000 frente al demócrata Al Gore.
