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13 de mayo 2013.- El Gobierno israelí aprobó hoy una reducción en la partida de defensa de 3.000 millones de shékels (647 millones de euros o 840 millones dólares), mil millones menos de lo exigido por el Ministerio de Finanzas, en una reunión extraordinaria de la Comisión de ministros para Asuntos de Seguridad.

“La Comisión aceptó la propuesta del primer ministro, Benjamín Netanyahu, de moderar el recorte en la partida de defensa en 1.000 millones de shékels (215 millones de euros o 280 millones de dólares) sin que ello suponga un incremento adicional en los impuestos”, señaló un comunicado oficial.

El recorte inicial previsto por Finanzas era de unos 4.000 millones en 2013 y 2014, respectivamente, al que el Ministerio de Defensa se opuso con el argumento de que “pondría en peligro la seguridad de Israel”, según opinaron altos mandos durante los últimos días.

En total, el Ministerio de Defensa recibirá este año una financiación de alrededor de 52.000 millones de shékels (11.214 millones de euros o 14.561 millones de dólares) de un presupuesto global de alrededor de 400.000 millones (86.267 millones de euros o 112.013 millones de dólares).

Netanyahu, que estuvo en la reunión del lado de las posiciones del Ministerio de Defensa, afirmó que el recorte de 3.000 millones “equilibra las necesidades del mercado y las de seguridad”, y recordó que el Ejército israelí necesita comprar nuevas baterías “Iron Dome” (Cúpula de Hierro) para defender a la población contra eventuales ataques con misiles.

Desarrolladas en los últimos años con financiación estadounidense, estas baterías probaron ser un efectivo escudo contra cohetes de corto y medio alcance durante la reciente operación “Pilar Defensivo” en Gaza.

El Ejército tiene en su poder en estos momentos cinco unidades, y aspira a disponer de otras ocho para completar un escudo que cubra todo el país.

Los recortes en la partida de Defensa, una de las principales del presupuesto de Israel, forman parte de los esfuerzos del nuevo ministro de Finanzas, Yair Lapid, para tapar un agujero de más de 30.000 millones de shékels (6.470 millones de euros o 8.401 millones de dólares) en las arcas públicas.

El proyecto de ley que Lapid presentó el jueves debe ser aprobado por el Gobierno y por el Parlamento (Kneset) este mismo mes, e incluye severos recortes en las asistencias públicas y una pronunciada subida de impuestos.

Finanzas advirtió de que lo que no se recorte en Defensa se buscará en otros ministerios y quizás por medio de nuevos impuestos, pero Netanyahu aseguró hoy que el presupuesto saldrá de “reservas de años anteriores”.

El presupuesto del Ministerio de Defensa no incluye los servicios de espionaje, que salen de la partida del primer ministro, ni otros gastos relacionados con la seguridad.

Israel también cuenta todos los años con alrededor de 3.000 millones de dólares de asistencia militar que le presta Estados Unidos, ampliable según las necesidades de seguridad de ambos países en el campo de la investigación de nuevas armas.

Fuente:diariovasco.com