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29 de mayo 2013.-El objetivo de desplegar misiles anti aviones S-300 en Siria sería derribar aviones de la Fuerza Aérea de Israel dentro de su propio espacio aéreo, algo que cambiaría completamente la cara de los conflictos futuros, dijeron funcionarios israelíes en Jerusalem al medio Israel Hayom. Las evaluaciones de Jerusalem explican que hay una profundización de la crisis diplomática entre Israel y Rusia por el plan de este último de proveer a Siria con un temible sistema de defensa aérea.

Mientras tanto, el periódico Daily Beast informó que el presidente americano, Barack Obama, ha ordenado al Pentágono preparar planes para una zona de no vuelo en Siria. Las noticias se produjeron como respuesta a la declaración rusa un día anterior en la que se comprometió a entregar el sistema de defensa al presidente sirio Bashar Assad.

El vice ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Ryabkov, dijo ayer que su país cumplirá con su contrato de proveer al régimen sirio con los S-300 y agregó que esto podría “ayudar a restringir a algunos impetuosos, considerando un escenario en el que se de una dimensión internacional al conflicto”, según una declaración que fue interpretada por funcionarios en Jerusalem como una señal para Israel.

El ministro de Defensa israelí, Moshe Ya’alon, dijo ayer que el plan de Rusia de proveer a Siria este armamento era “una amenaza”. También agregó: “Puedo decir que los embarques no partieron todavía. Espero que no lo hagan y si lo hacen, Dios prohíba, sabremos qué hacer”.

Por su parte, el ministro de Asuntos Estratégicos israelí, Yuval Steintiz, expresó preocupaciones sobre la planeada venta de S-300 y expresó que esperaba que Rusia cancele el acuerdo: “Creemos que esta conducta, de proveer armas a Damasco, a Assad, en este momento crucial de la terrible guerra civil es totalmente incorrecto. Este es un tipo de incentivo, un tipo de apoyo a este régimen brutal que está completamente equivocado, también desde un punto de vista moral. Uno no puede entender ni justificar tales conductas”.

Steinitz también dijo que los S-300 están diseñados para derribar aviones y misiles a alcances de 200-300 kilómetros. Como resultado podría embestir aviones dentro de Israel.

Fuente:prensajudia.com