La victoria del presidente electo iraní Hassan Rohani demuestra la superficialidad del argumento de que las sanciones severas unirían al pueblo iraní en torno al régimen, expresó el primer ministro Biniamín Netanyahu, en una entrevista ofrecida al diario The Washington Post.
“Las sanciones fueron a menudo descartadas porque se alegaba que unirían al pueblo iraní alrededor del régimen”.
“Es importante incrementar las sanciones, no ceder, y de ninguna manera ofrecer concesiones por adelantado ante ningún cambio serio en el programa nuclear de Irán Las sanciones producen algunos cambios en Irán, pero no han producido, hasta ahora, los cambios que debemos ver”.
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Netanyhu advirtió que Irán no pretende producir una o dos bombas nucleares, “sino doscientas bombas. Ellos están fabricando Misiles Balísticos Intercontinentales paralelamente al desarrollo de su programa nuclear. Los Misiles Balísticos Intercontinentales no nos tienen a nosotros como objetivo; sino a ustedes. Dentro de seis a ocho años, ellos podrán alcanzar el área continental de Estados Unidos”.
Con respecto las negociaciones de paz con los palestinos, Netanyahu dijo que imponer condiciones previas a las negociaciones – algo que los palestinos vienen haciendo consistentemente en los últimos cuatro años – “es la manera más rápida de socavar el proceso”.
Netanyahu expresó que el conflicto con los palestinos no se ha resuelto no por los asentamientos; sino porque los palestinos “se niegan persistentemente a reconocer un Estado judío soberano dentro cualquier frontera”.
Los asentamientos “son uno de los resultados” del conflicto; “pero ciertamente no la causa”, subrayó el primer ministro.
Netanyahu rechazó la idea de que Israel deba resolver el conflicto con los palestinos para lograr que “se disipe la presión internacional sobre nuestras espaldas”. Una vez que el conflicto se haya resuelto, apuntó, habrá “presiones sobre otras cosas. La historia del pueblo judío no habla favorablemente en este sentido”.
Netanyahu afirmó que las “distorsiones horribles” creídas sobre los judíos en los últimos 2.500 años se han trasladados a los prejuicios sobre el Estado judío. “No creo que eso vaya materialmente a cambiar”.
El primer ministro afirmó que Israel necesita resolver la cuestión palestina “porque no queremos ser un estado binacional”. El truco es, según señaló, encontrar “un equilibrio entre establecer una separación entre israelíes y palestinos, y asegurar que el Estado palestino no se convierta en un puesto de avanzada iraní”.
Fuente: Aurora
