ENRIQUE RIVERA PARA ENLACE JUDÍO

El Presidente del Consejo Ciudadano del D.F., Luis Wertman, tiene una visión muy clara del problema que durante varios días ha quitado el sueño, el tiempo y la paciencia a los capitalino: las marchas y plantones que maestros de varios Estados de República, integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, han llevado a cabo en las calles y avenidas de la capital.

“Es como si alguien viniese a tu casa o tu patio, a protestar por algo que un tercero le hizo”, ejemplifica.

Por otra parte, al abordar el tema de la reacción de las autoridades, señala que tanto el Aeropuerto, como la Cámara de Diputados o la de Senadores, “son competencia federal y no de la ciudad, así que tiene poca competencia la policía capitalina en dichos casos”.

Sin embargo, reconoce, que el ciudadano puede solicitar a las autoridades capitalinas, “que dentro de su competencia, se haga algo para que las manifestaciones no afecten a las personas, la vialidad, el orden e incluso el comercio y otras actividades”.

Sea como fuere, se impone algún tipo de control y de solución, tanto a las demandas, legítimas o no, viables o no, de los profesores, así como a las quejas de los ciudadanos que rayan ya en hartazgo. La mala noticia es que es muy probable que cuando se levanten los campamentos de maestros, nadie nos asegura que no volverán (ver Plantón de maestros en el Zócalo), puesto que, como se ha señalado: los profesores definen su movimiento como uno democrático, el cual tiene injerencia no sólo en la educación, sino en rubros tales como la Reforma Financiera, la Reforma Energética y otras problemáticas, con lo cual su presencia podrá ser constantemente renovada en las calles de la ya difícil Ciudad de México.