AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO

Palabras de Sabina Berman  al recibir el 14 de junio, el Premio APEIM 2015:

Agradezco ésta distinción que me hace APEIM, una distinción que se agranda al hacerme otorgada a la par de Angelina Muñiz-Huberman. Nuestros nombres riman doblemente “Angelina-Sabina; Huberman Berman”. Una escritora que sus letras han enriquecido su tradición judeo-sefaradí. Más descriptivamente lo que ha hecho Angelina es crear puentes entre los distintos tiempos y geografías del judaísmo en español.

Agradezco en especial esta distinción, porque no hace mucho tiempo las palabras periodista, escritor, israelí y mexicana, construían un conflicto, construían un laberinto de sucesiones, dilemas, para los que éramos todo eso y también para los que nos miraban serlo desde afuera.

Me recuerdo hace unos quince años en una redacción de un periódico nacional, rodeada de al menos diez periodistas exigiéndome que decidiera si era israelita o mexicana. Qué eres primero, ¿israelita o mexicana? ¿Si hubiera una guerra entre México e Israel, por quién tomarías tu metralleta? No una escena muy distinta que la que padeció mi padre en la Universidad de Varsovia, antes de la segunda guerra mundial, donde los nacionalsocialistas, esos tontos polacos, no una vez, sino varias veces lo arrinconaron en el patio para exigirle que se declarara polaco o judío. Le preguntaban ¿En esta guerra que se avecina, de qué lado estarás de los polacos o los judíos? A lo que mi padre respondió “Del otro lado del mar”

¡Cómo ha cambiado el mundo, por fortuna! Hoy puedo agradecer ésta distinción que reúne a México y a la identidad judía, en una sola frase, un solo sin conflicto, sino con alegría. Hoy en éste México que celebra la diversidad, debo insertar aquí, no celebra en ausencia de los judíos, sino también por el trabajo de los judíos, en especial de los escritores y periodistas judíos.

Hoy podemos hablar de tener dos identidades, sin conflicto. Podemos hablar de ser judíos y mexicanos, sin poner jerarquías, podemos decir que nuestro corazón son pasos comunicantes, que son dos tesoros, dos acervos culturales que se comunican entre sí para ayudarnos a describir nuestro presente y a planear nuestro futuro. Qué bueno ser escritor, periodista, israelita y mexicano. Son cuatro dados que se mecen en la mano del tiempo y hoy caen en el tablero de éste día marcando una cifra de celebración. Muchas gracias”.