AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – El conflicto árabe-israelí es básicamente político, pero preocupa la posibilidad de que se convierta en uno religioso, advirtió el embajador de Israel en México, Jonathan Peled, quien también alertó por el peligro del extremismo islámico, que amenaza no sólo a Israel, sino a los propios países árabes.

Jonathan Peled Enlace Judío

Durante muchos años la causa palestina sirvió de alguna manera como rehén o como excusa para los países árabes al luchar contra Israel.

Creo que hoy en día hay mucho más una convergencia de intereses entre los países árabes con Israel, porque están ahora enfrentando desafíos del Islam radical, que es también lo que nos está amenazando a nosotros y al campo palestino”, dijo.

En señalamientos hechos durante una conversación en el programa Análisis Global de Excélsior TV, Peled anotó que a nadie conviene que Oriente Medio se prenda en llamas por el extremismo islámico.

No debemos permitir que este conflicto político, territorial, se convierta en una guerra o en un conflicto religioso. Esto realmente creo que va a poner fin a la esperanza de lograr un acuerdo y una paz entre nosotros y los palestinos”, apuntó.

Las declaraciones fueron grabadas antes de que un grupo presuntamente de palestinos incendiara la tumba de José, considerada como un lugar sagrado por los judíos, aunque también es reverenciado por los musulmanes.

Agregó que si no hay cuidado y calma, existe la posibilidad de que el conflicto político-territorial se convierta en un problema religioso.

Vemos estas expresiones realmente muy populares entre las masas. No solamente en el campo palestino, sino en el mundo árabe, en el mundo del Islam”, dijo en alusión a las llamadas por soluciones extremas o “guerra santa”.

De acuerdo con el diplomático, el fenómeno es visible “cuando hay una profanación del profeta Mahoma, cuando sale una caricatura en algún país europeo; vemos cómo las masas, lamentablemente, se provocan y se incitan, y van al fanatismo y a la violencia.

Esto es lo que tenemos que prevenir, tenemos que llamar a la calma, estrechar nuestras manos en la paz y sentarnos a dialogar, porque es la única manera”,
subrayó.

En ese sentido, opinó que son los líderes “quienes tienen que dar un ejemplo a sus pueblos de que se pueden sentar y dialogar. Podemos tener diferencias, pero podemos discutirlas y resolverlas”.

En ese marco, señaló que Israel está abierto a dialogar, sobre todo con los países del Golfo Pérsico, aunque no necesariamente con Irán, país al que consideró como amenazante y como un peligro debido a sus presuntas capacidades nucleares.

El diálogo puede ser útil a todos. “Creo que estos países entienden que (Israel) es un modelo que les puede servir a ellos. Israel no está por conquistar, invadir o influenciar a Arabia Saudita, sino al revés, quiere vivir en paz en esta vecindad y poder contribuir al desarrollo de esta región”, aseguró.

Compartimos el mismo aire, la misma agua”, concluyó el embajador Peled.

Fuente: EXCELSIOR.COM.MX por José Carreño Figueras