Este próximo 17 de abril de 2016, serán las próximas elecciones de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). Se han escuchado diferentes posibilidades comunitarias para afrontar este trascendente evento que garantizaría ni más ni menos, la continuidad democrática en el seno de la comunidad judía.

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GUIDO MAISULS PARA LA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Algunos hablan de formar una comisión de consenso con dirigentes de diferentes espacios, es decir una mesa amplia que represente a toda la comunidad como se hizo en las elecciones de DAIA. Otros desean formar un gran frente laico para contraponerlo a la lista que representa a los votantes del campo ortodoxo. Y existen voluntades de concurrir a las elecciones tradicionales con las diversas listas separadas para luego tratar de formar un gobierno comunitario con acuerdos postelectorales.

Pero, a la hora de decidir el futuro comunitario, ¿Qué comunidad judía queremos? ¿Cuáles son los interrogantes que deberían primar en las conciencias de los votantes de AMIA, de los dirigentes comunitarios, de los formadores de opinión y de todos los judíos argentinos?

¿Se lograría tener conciencia de la necesidad de incorporación y participación activa dentro de los diferentes estamentos comunitarios, a amplios sectores de una población judía que vive completamente alejada del judaísmo por carencia de motivaciones, de conocimientos o de vías adecuadas de comunicación?

¿Se podría garantizar la accesibilidad a la educación, la cultura y la difusión de los valores judaicos en estos críticos momentos presentes donde prevalecen en nuestra sociedad argentina la banalidad, el individualismo, el consumismo desenfrenado y la pérdida de valores éticos y morales que en épocas no tan lejanas nos engrandecieron y enorgullecieron?

¿Sería posible aumentar el acceso a la educación formal implementando revolucionarios planes de becas e incentivos para los sectores que no puedan acceder a causa de su alejamiento de la vida judía y fundamentalmente por motivos socioeconómicos a la red escolar comunitaria? “Nuestros niños no pueden amar lo que no pueden llegar a vivir y a conocer”.

¿Se podría fortalecer más espacios contenedores, atractivos y abiertos para una juventud actualmente dispersa, desorientada, sin metas personales y comunitarias claras y sustentables donde puedan participar democráticamente, opinar, sentirse representados y crear nuevas propuestas superadoras a estos tiempos presentes?

¿Lograría la comunidad judía mantenerse unida pues la unidad es la síntesis del pensamiento democrático, que respete la existencia de diferentes posiciones y que no pretenda representar a un solo pensamiento?

¿Seremos concientes, hoy más que nunca, que la comunidad judía debe aferrarse a su fe ancestral, a sus valores éticos, a sus irrenunciables vínculos con el Estado de Israel para poder realizarse plenamente como judíos pero a su vez perseverar en ser plenos y orgullosos ciudadanos argentinos?

¿La Comunidad judía estaría a la altura de superar los dramáticos tiempos históricos que atraviesan a la República Argentina, a la sociedad argentina y a un mundo en perpetua crisis de valores, ideales y perspectivas?

A la dirigencia comunitaria judía.
A los socios votantes de AMIA.
A los formadores de opinión comunitaria.
A todos los judíos argentinos.

El futuro comienza ahora