LEÓN OPALÍN PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO

El 9 de mayo de 1950, Día de Europa, el entonces ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Robert Shuman, realizó la declaración de un Plan que derivaría en la creación de la Comunidad Europea del Carbón y el Acero (CECA), fundada el 18 de abril de 1951 y en vigor desde el 23 de julio de 1952, por un periodo limitado de 50 años, que expiró el 23 de julio del 2002. Esta entidad supranacional integrada por Francia, Alemania Occidental, Italia, Bélgica, Luxemburgo y Holanda tuvo como objetivo el organizar la libertad de circulación del carbón y el acero y libre acceso a su producción entre sus seis miembros fundadores; al mismo tiempo se creó una Alta Autoridad Común para supervisar el mercado y el respeto de las normas de competitividad y la transparencia de los precios.04

La CECA fue decisiva como embrión de la integración europea y finalmente culminó en la Unión Europea (UE), una entidad geopolítica que cubre gran parte del continente europeo; la UE fue resultado de numerosos tratados y ha sido objeto de ampliaciones; de sus originales 6 miembros en el presente tiene 28, que representan un mercado de aproximadamente 510 millones de personas. Turquía, Ucrania, Israel y otras naciones europeas aspiran desde hace varios años a formar parte de la UE.

Por otra parte, como elemento del proceso de integración europeo se creó la Eurozona en 1999, que en el presente la forman 19 estados de la UE que han adoptado el euro como moneda oficial, estableciendo así una unión monetaria; la política monetaria del euro es administrada por el Banco Central Europeo (BCE) y el Eurosistema, que comprende al BCE y los bancos centrales de los Estados de la UE.

En este contexto, la UE es evaluada como el proceso económico, social y político de integración más exitoso del mundo; no obstante, hoy día enfrenta la mayor crisis de su historia que amenaza con resquebrajarla, entre los principales factores que influyen en la misma, destacan los siguientes:

– Flujo masivo de inmigrantes del Medio Oriente, África, Los Balcanes Occidentales y Asia del Sur a territorio europeo; en el 2015 sumaron más de un millón de personas, de las cuales el 95.0% habían solicitado asilo político; 3006 murieron en el intento de llegar a Europa. De acuerdo al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados fue la mayor afluencia de refugiados en décadas; en los primeros tres meses del 2016 llegaron más de 100 mil.

La mayoría de estos movimientos de población se caracterizan por una migración forzada de víctimas de conflictos armados, persecuciones étnicas o religiosas, pobreza, cambio climático (sequías extremas) o violaciones masivas de derechos humanos y, por la acción de redes delictivas transnacionales del tráfico ilícito de migrantes –que los exponen a transportes en condiciones peligrosas o denigrantes- y de trata de personas.

– El auge imparable del populismo de la extrema derecha alentado por la fobia racista de diferentes sectores de la población de la UE, que no obstante el término de la Segunda Guerra Mundial, esta nunca despareció y ahora cobra fuerza ante el flujo masivo de refugiados, en su mayoría musulmanes, con unos valores y una cultura que no es compatible con la tradicional democracia europea, debilitada por sus líderes nacionales y una ciudadanía amenazada por la pérdida de los valores y principios éticos en que se fundamenta la UE.

El populismo de los partidos políticos es un fenómeno que afectará a las próximas elecciones generales del 2017 de dos de las naciones más fuertes de la UE: Francia y Alemania; en la primera también tendrá fuerte impacto la crisis de seguridad que se vive por los ataques terroristas que ha registrado.
– Fractura entre el Este y Oeste de los miembros de la UE. Los países del Grupo Oriental que se integraron a la UE en el 2004: Polonia, Hungría, Eslovaquia y Chequia, se muestran reacios a la reforma de asilo, especialmente a la acogida obligatoria de refugiados y rechazan las multas que se decidió aplicar en el seno de la UE a los países que no cumplan con los compromisos acordados de recibir refugiados.

El discurso populista y racista en estas naciones, llamado grupo Vicegrado, es lamentable. Víktor Urban, primer ministro de Hungría ha expresado su rechazo a los refugiados señalando que estos ponen en peligro a la cultura cristiana europea; lo cual es parcialmente cierto, empero, hay que recordar que Hungría ha recibido fondos de ayuda para su integración a la UE, y por lo tanto tiene la obligación de cumplir con las directrices de la misma en relación a los migrantes. En Polonia, el líder del Partido Ley Justicia, Jaroslaw Kaczynski ha llegado al extremo de declarar “que los refugiados traen parásitos que portan enfermedades inmunes en sus países de origen, empero, no en Europa”.

Asimismo, el Presidente de Chequia, el populista Milos Zeman, ha indicado “que los musulmanes son prácticamente imposibles de integrar”. A su vez el Primer Ministro checo, Ruber Fico, ha dicho que su país solo acogerá refugiados católicos.

– Las secuelas de la Recesión del 2008-2009 son manifiestas; débil crecimiento, y altos niveles de desempleo, entre otros males, “que no se solventan, ni disimulan por el hecho de que la eurozona haya, finalmente, recuperado el tamaño del PIB previo a la crisis”. Por lo demás, persisten los desequilibrios regionales entre los prósperos del Norte y “los vulnerables de las periferias, y sobre todo la desigualdad social”.

– El peligro que representaría el Brexit, la salida de Gran Bretaña de la UE; si se confirma en el Referéndum que se realizará entre la población de ese país el próximo 23 de junio, a fin de determinar si Gran Bretaña permanece o sale de la UE. La salida de la UE no solo incidiría negativamente en la Gran Bretaña, también en la UE y en el resto del mundo. El primer ministro de Gran Bretaña, David Cameron, advirtió el pasado 9 de mayo, que abandonar la UE amenaza la paz en Europa.

– El desafío de Rusia a Europa; Putin ya se adjudicó Crimea y sigue alentando a los rusos residentes en Ucrania a buscar, a través de la violencia, su independencia de ese país. A todo lo anterior se suman desacuerdos entorno a las negociaciones del Tratado Comercial de la UE con EUA; Angela Merkel, insiste en acelerar las negociaciones y terminarlas antes de que Barak Obama concluya su gestión; en cambio, Hollander se resiste a concluirla.

“El desorden y la insolidaridad con que los veintiocho afrontan la continua oleada de refugiados no puede excusarse por el hecho de que se trata de la mayor crisis migratoria afrontada por la UE en toda su existencia; para eso se creó, para abordar juntos los grandes retos comunes”. También se requiere fortalecer la democracia; presentar una iniciativa y defensa de los ciudadanos de la UE; reimpulsar el crecimiento económico, el empleo y la innovación.

La UE se encuentra en una encrucijada, son varios los caminos que debe tomar para volver a ser la cuna de la democracia y del multicultarismo tolerante. La reciente elección de Sadiq Khan como alcalde de Londres, hijo de inmigrantes paquistaníes, que profesa la fe musulmana; puede ser una fuente inspiradora para Europa; su misión más difícil, “será convencer a muchos de los que comparten su fe religiosa de hacer las paces con los valores seculares occidentales que él ha hecho suyos, sin renunciar a su origen y a su religión”.