YORAM ETTINGER / ENLACE JUDÍO MÉXICO –Según el profesor Robert Bellah, destacado sociólogo de la Universidad de Berkeley, hay “una religión civil bien institucionalizada” en los Estados Unidos, que establece la separación entre la religión y el estado, pero no entre la religión y la sociedad. De hecho, el presidente John Quincy Adams escribió: “La ley dada en el Sinaí fue tanto civil como municipal, así como un código moral y religioso”.

El profesor Bellah sostiene que las libertades civiles reflejan más responsabilidades que derechos y dice: “Detrás de la religión civil se encuentran arquetipos bíblicos [como] el Éxodo, el pueblo elegido, la tierra prometida, la nueva Jerusalem… una herencia de la experiencia moral y religiosa…”.

El legado de Moisés, el dador de la ley definitiva, ha sido un arquetipo, una parte integral de los Estados Unidos en el ámbito cultural, ético, jurídico y político de la historia, destacando los principios éticos judeocristianos que dieron forma al país, y que forjaron los cimientos de sus vínculos especiales con el Estado judío. Por lo tanto, la mayoría de los estadounidenses –desde los primeros peregrinos, pasando por los Padres Fundadores y hasta hoy– tienen a Israel en alta estima, y tienen en cuenta que la existencia del estado judío es más que un asunto de política exterior.

Por lo tanto, la metáfora de Moisés se ha empleado ampliamente en el discurso político de Estados Unidos. Por ejemplo, en abril de 2010, el profesor Thomas Sugrue escribió en su libro, Ni siquiera el pasado: Barack Obama y la carga racial: “La metáfora de Moisés y Josué, el campeón de la libertad y el constructor de la nación, ofreció un marco de gran alcance para la campaña de Obama”. En enero de 2000, el líder republicano en el Senado, el senador Mitch McConnell, saludó al recién elegido presidente George W. Bush, en el tradicional almuerzo posterior al discurso inaugural en el Senado: “confiamos en que será un líder en la mejor tradición de Josué y Caleb”. El 14 de enero de 2013, el Kansas City Star publicó: “Martin Luther King debe haber tenido a Moisés en cuenta en la noche de su último sermón, cuando dijo: Dios me ha permitido subir a la montaña, y he visto la tierra prometida”. Harriet Tubman, una conocida abolicionista y conductora del ferrocarril subterráneo que se usaba para liberar esclavos era llamada “Mamá Moises”.

El 27 de junio de 2005, la Corte Suprema de Estados Unidos confirmó la constitucionalidad del monumento de 2 metros de alto de los Diez Mandamientos en los terrenos del Capitolio de Texas. Según el Juez William Rehnquist: “La religión tiene una gran parte en la identidad de nuestra historia y gobierno… Agradecemos el papel desempeñado por los Diez Mandamientos en el patrimonio de nuestra nación, algo común en toda América… Desde 1935, Moisés ha estado de pie con las dos tabletas con parte de los Diez Mandamientos escritos en hebreo, entre otros en la Corte Suprema de Estados Unidos.

Representaciones de los Diez Mandamientos adornan las puertas metálicas que recubren los lados norte y sur de la sala, así como las puertas que conducen a la sala de audiencias en la Suprema Corte. Moisés también se sienta en la fachada exterior de la Corte Suprema de Estados Unidos con las tablas de los Diez Mandamientos.

Desde 1897, una gran estatua de Moisés sosteniendo los Diez Mandamientos, junto a una estatua del Apóstol Pablo, ha estado en la rotonda de la Biblioteca del Congreso en el edificio Jefferson. Un medallón con dos tabletas que representan los Diez Mandamientos decoran el suelo de los Archivos Nacionales. Dentro del Departamento de Justicia, una estatua titulada “El espíritu de la ley” tiene dos tablas que representan los Diez Mandamientos que se extienden a sus pies. Delante del edificio Ronald Reagan se encuentra otra escultura que incluye una representación de los Diez Mandamientos. Así también una escultura de 24 pies de altura, fuera del Palacio de Justicia Federal, que representa, entre otras cosas, los Diez Mandamientos y una cruz. Moisés también tiene un lugar destacado en la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Moisés fue un dador de la ley, así como un líder religioso, y los Diez Mandamientos tienen un significado histórico innegable”.

El 27 febrero 2005 una encuesta de Gallup mostró que el 76% de los estadounidenses estaban a favor de mostrar el monumento de los Diez Mandamientos en el suelo del Capitolio de Texas.

Por otra parte, el 29 de marzo de 2006, el Senado del Estado de California aprobó proyecto de ley SCR 108 que dice: “Esta medida sería reconocer y aceptar que el Decálogo, también conocido como los Diez Mandamientos, se encuentra entre los documentos históricos influyentes que han contribuido significativamente al desarrollo de los principios legales y gubernamentales e instituciones seculares de los EE.UU. y el Estado de California… En la historia de las instituciones americanas, ningún libro – excepto la Biblia – ha jugado un papel tan grande… Los miembros de la Corte Suprema de Estados Unidos han señalado el papel fundamental desempeñado por los Diez Mandamientos en el desarrollo de nuestro sistema legal…”.

Por otra parte, el 8 de abril de 2015, el gobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, convirtió en ley un proyecto para erigir un monumento financiado de forma privada de los Diez Mandamientos en los terrenos del capitolio del estado en Little Rock. EL congreso de Arkansas y el Senado aprobaron los proyectos de ley 72:7 y 27:3, respectivamente.

El presidente Truman declaró: “La base fundamental de las leyes de esta nación le fue dada a Moisés en el monte …” Un siglo antes, el presidente Lincoln se refirió a Éxodo, capítulo 20, los Diez Mandamientos, como la suma de su teología.

Moisés y/o los Diez Mandamientos están presentes en los Tribunales Federales de los Estados Unidos en Cleveland, OH y Indianapolis, IN; las Cortes Supremas en Harrisburg, PA, St. Paul, MN, Lansing, MI y Knoxville, TN; los Tribunales del Condado de Cleveland, OH, West Chester, Pensilvania, Pittsburgh, PA, Ft. Wayne, IN y Jackson, MS; el Tribunal de Apelación en Brooklyn, NY; la Biblioteca Pública de Boston y el Capitolio del estado en Lincoln, NE; entre otros.

Moisés y los Diez Mandamientos han sido siempre parte de la historia de Estados Unidos. En estos queda de manifiesto la alianza Estados Unidos-Israel, que ha trascendido las coyunturas y las políticas transitorias y las consideraciones geoestratégicas, catapultando la cooperación Estados Unidos-Israel a niveles sin precedentes, en consonancia con la voluntad del pueblo estadounidense.

Fuente: infopublico.com