Nonie Darwish

NONIE DARWISH / Temprano esta mañana una estación de radio árabe en Oriente Medio pidió mi opinión sobre la prohibición del Presidente Trump de entrada a los refugiados y a los ciudadanos de siete naciones musulmanas. La presentadora de radio, que parecía enojada por la prohibición, era árabe cristiana. Se sorprendió al oír que yo apoyaba la prohibición y que creo que debería haber tenido lugar al día siguiente del 11-S.

SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Luego me preguntó si conocía alguna activista árabe-americana que estuviera en contra de la prohibición porque quería entrevistar a alguien en contra de la prohibición. Pareció sorprendida al saber que no tengo ningún amigo árabe o musulmán que esté protestando por la prohibición, y que muchos inmigrantes de origen islámico y de Oriente Medio apoyan la prohibición y están hartos y avergonzados por lo que están haciendo los yihadistas.

Dijo que todo lo que ve en CNN y otros canales son disturbios que retratan a casi todos los estadounidenses que apoyan a musulmanes y contra Trump. Estoy molesta por el éxito de la propaganda izquierdista en todo Oriente Medio. Trae recuerdos de la vida del adoctrinamiento del odio y la desinformación que viví durante la mayor parte de mi vida.

¿Qué harían los países musulmanes con Occidente, pregunté, si 19 terroristas estadounidenses lanzaran aviones a las capitales árabes y a su gobierno y al cuartel general militar? ¿Qué pensaba ella que harían los árabes si cada semana o así terroristas estadounidenses llevaran a cabo matanzas sincronizadas en todo el mundo musulmán, mataran musulmanes a tiros, los hicieran explotar con hornos a presión caseros, atropellaran a las multitudes con camiones? Hubo silencio.

Luego comenzó a calmarse y dijo que por supuesto que está en contra del terrorismo, “pero”. Le pregunté: “¿Ves lo que la yihad hizo a tu comunidad cristiana en Oriente Medio?” Se quedó en silencio un minuto, entonces se me ocurrió que podría tener miedo de continuar la conversación porque sus jefes probablemente eran musulmanes.

Estaba segura de que me iba a colgar, pero para mi sorpresa me pidió que esperara. Luego volvió, en vivo desde el estudio, y comenzó a entrevistarme y a hacer las mismas preguntas en el aire. Volqué mi corazón en árabe a los oyentes árabes.

La lección aquí es que los árabes tienen hambre de escuchar la verdad; esta estación árabe, en lugar de rechazar estas ideas, terminó poniéndolas en el aire. La lección que Estados Unidos necesita aprender es que Occidente no les está haciendo un favor a los musulmanes (especialmente los reformistas) tratándolos constantemente como niños a los que hay que proteger de la realidad.

Los musulmanes tienen que saber que el mundo sí tiene una preocupación justificable y legítima sobre el Islam y las acciones realizadas en el nombre del Islam por los musulmanes. Los musulmanes necesitan mirarse en el espejo y ver el mundo desde el punto de vista de sus víctimas. En cambio, Occidente está sacrificando su cultura, sus valores, sus leyes, su orgullo e incluso su amor propio. La cultura musulmana necesita una llamada de atención para decirles que, tarde o temprano, las naciones no musulmanas cerrarán sus puertas a cualquier tipo de inmigración musulmana si continúa la cultura de la yihad. También será un fuerte mensaje para los musulmanes que ya están en Occidente y que todavía creen en la yihad.

El pueblo musulmán está hambriento de la verdad: que su sistema educativo y la predicación de las mezquitas están llenos de incitación, son abominables, están llenos de odio y es el fundamento sobre el cual se construye la yihad violenta. El mandamiento islámico de hacer la yihad sacrifica a hombres, mujeres y niños musulmanes para matar y ser asesinados.

Mientras Occidente continúe su apaciguamiento de la yihad islámica, el Islam nunca se reformará y Occidente perderá. Hasta ahora, Occidente ha continuado extendiendo un salvavidas a la religión del Islam; una religión para la cual el enemigo número uno es la verdad, y que lucha por sofocar la verdad.

Podría ser la compasión lo que lleva a Occidente a aceptar millones de refugiados musulmanes, pero es una compasión temeraria. ¿Por qué Arabia Saudita no toma refugiados temporalmente hasta que las cosas se establezcan en Siria e Irak? ¿Los occidentales cuestionan la motivación de las teocracias islámicas, en cuanto a por qué las naciones árabes ultra ricas nos están enviando a sus refugiados pero no aceptando ninguno?

¿Quién se beneficia realmente de la política de apaciguamiento, la aceptación de las teocracias golpeadas por la Sharia y su educación yihadista y cargada de odio? Se necesita urgentemente un “amor duro” para que los musulmanes se vean motivados a cambiar y reformarse.

Nonie Darwish, nacida y criada en Egipto, es autora de “Completamente diferente, por qué he elegido los valores bíblicos sobre los valores islámicos”

Fuente: GATESTONE INSTITUTE – Traducción: Silvia Schnessel – © EnlaceJudíoMéxico