BARAK RAVID

El jefe de la Autoridad de Inmigración de Israel se disculpó el jueves por las molestias causadas a la ejecutivo del Nuevo Fondo Israel (NFI), quien fue detenida para ser interrogada en el Aeropuerto Internacional Ben-Gurión al llegar al país.

ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Jennifer Gorovitz, vicepresidenta del NFI, llegó a Israel para participar en una reunión del consejo del NFI. Los funcionarios del aeropuerto la interrogaron tres veces sobre las actividades de la ONG y sobre el financiamiento que suministra a diferentes organizaciones no gubernamentales en Israel.

Esta es la primera vez que un alto funcionario de la organización ha sido interrogado en el Aeropuerto de Ben-Gurión.

La Autoridad de Población e Inmigración comentó que su director general, Amnon Shmueli, había hablado con la presidenta del Nuevo Fondo Israel, Talia Sasson, para explicarle lo que había sucedido y los procedimientos en vigor. “Shmueli dejó en claro que el interrogatorio de Gorovitz era rutinario y que no había intención de insultarla. El director general se disculpó por las molestias causadas,” dijo la autoridad.

Previamente, la diputada Tamar Zandberg de Meretz pidió al ministro del Interior Arye Dery investigar por qué Gorovitz había sido interrogada al llegar a Israel.

“Esta es una persecución política, un acoso y un intento de silenciar a los que luchan por la sociedad israelí,” escribió Zandberg. Las puertas de Israel no pueden ser un lugar para el “acoso y el etiquetado político”.

Gorovitz, de 50 años, se unió al NFI en 2015 después de desempeñar varios cargos en la comunidad judía de San Francisco, el más alto de los cuales fue el de directora de la Federación Judía de San Francisco. Gorovitz es vicepresidenta de Operaciones y Administración del NFI, y es responsable de asuntos presupuestarios, entre otras áreas.

Gorovitz dijo que cuando llegó su turno en el control de pasaportes del aeropuerto, le dijo al funcionario que visitaba Israel en un viaje de negocios. Cuando se le preguntó acerca de su empresario, respondió que trabajaba para Shatil, la división del NFI que asesora a organizaciones sin fines de lucro, y le dijo al funcionario de control de fronteras que asesora a grupos de la sociedad civil en Israel.

Fue entonces cuando el interrogatorio de rutina se complicó. Según Gorovitz, el funcionario le preguntó si trabajaba con organizaciones palestinas, y ella respondió que su organización trabaja con todos los ciudadanos israelíes. Le preguntó si planeaba trabajar en los territorios, y ella dijo que no, pero él no parecía creerle.

Gorovitz dijo que preguntó si había algún problema, señalando que era judía y sionista, pero que el funcionario sólo hizo una observación sarcástica acerca de su sionismo. La hizo esperar 10 minutos y luego le pidió que esperara en una habitación cercana, donde fue sometida a más preguntas.

Mientras estaba siendo interrogada, Gorovitz observó que su interlocutor sostenía un documento con bastante información sobre ella. Uno de los términos destacados en el documento era BDS.

“Me preguntó qué hacía el Nuevo Fondo Israel y le dije que financiábamos organizaciones de la sociedad civil en Israel y que nos oponíamos al BDS, me preguntó a quién financiábamos y luego me pidió que esperara afuera,” dijo.

Después de unos minutos más de espera, Gorovitz fue enviada a una tercera ronda de preguntas. Esta vez fue interrogada por dos hombres vestidos de civiles. Ellos no se identificaron ni indicaron a qué organismo estatal pertenecen. “Me hicieron las mismas preguntas,” dijo. “Después de unos minutos me pusieron en libertad y me dejaron entrar a Israel.”

Fuente: Haaretz / Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico