JUDAH ARI GROSS

Veinticinco reservistas beduinos israelíes anunciaron el domingo que no se presentarán al ejército hasta que el gobierno actúe en contra del maltrato de su comunidad, refiriéndose específicamente a la discriminación en el sector laboral y las declaraciones “calumniosas” del ministro de Seguridad Pública Gilad Erdan.

La carta abierta fue escrita en respuesta al incidente ocurrido en la aldea beduina de Umm al-Hiran el mes pasado, en el que agentes de la policía dispararon a Yaqoub Mousa Abu al-Qia’an, un residente local, antes de que atropellara al oficial, Erez Levi. Ambos murieron en el incidente.

Erdan y el Comisario de la Policía de Israel, Roni Alsheich, describieron rápidamente el incidente como un ataque terrorista e insinuaron que Abu al-Qia’an estaba asociado o inspirado por el grupo del Estado Islámico.

En el funeral de Levi, Alsheich señaló que Abu al-Qia’an había trabajado en una escuela en la ciudad beduina de Hura, donde seis de los profesores habían sido arrestados en 2015 por apoyar al Estado Islámico. Pero eso no era del todo exacto. Ese año, seis personas fueron detenidas en Hura, pero sólo cuatro eran docentes y sólo uno fue acusado de apoyar al grupo terrorista.

Tras el incidente de hace unas semanas, la policía dijo en un comunicado que había hallado un periódico en la casa de Abu al-Qia’an que contenía un artículo sobre un ataque del Estado Islámico en su portada.

Sin embargo, una investigación del incidente realizada por el Departamento de Investigaciones Policiales del Ministerio de Justicia contradice estas afirmaciones, diciendo que los disparos de la policía pudieron haber causado que Abu al-Qia’an perdiera el control de su vehículo y atropellara a Levi.

“En estos días hemos sido testigos de una campaña de difamación por parte del ministro de Seguridad Pública y del jefe de policía contra la comunidad beduina, tras la muerte de un maestro de escuela, que el ministro llamó “terrorista”, dice la carta.

“Nosotros decimos, ¡no más!”

Conforme se filtran los detalles de la investigación del Departamento de Investigaciones Policiales, Erdan y la Policía de Israel han sido duramente criticados por otros políticos y los medios de comunicación, acusándolos de hacer declaraciones despectivas sobre Abu al-Qia’an antes de que el caso fuese investigado adecuadamente.

La semana pasada, Erdan retrocedió en sus declaraciones iniciales, refiriéndose a lo que sucedió en Umm al-Hiran como un “incidente” y un “ataque terrorista”, llamando a Abu al-Qia’an un “ciudadano” en lugar de un “terrorista . “

Dos días más tarde, prometió disculparse con la familia de Abu al-Qia’an “si se corrobora que el incidente no fue un acto terrorista”.

La carta fue escrita por un grupo de 25 residentes de Bir al-Maksur, un importante pueblo beduino en el norte de Israel.

“Nosotros servimos en las Fuerzas de Defensa de Israel en unidades de combate, hemos derramado sangre y lágrimas resguardando las fronteras de Israel y la seguridad de sus ciudadanos”, escribieron los autores.

“Desafortunadamente, al terminar nuestro servicio militar, comprendimos que el país que nos envió a luchar en el campo de batalla nos ha abandonado, día tras día, hora tras hora”.

Los 25 reservistas citaron las dificultades que enfrentan los miembros de su comunidad para conseguir empleos tras su servicio militar.

“Sí, parece que un arma en las manos de los beduinos es peligrosa. Comprendimos que no podemos trabajar en nada que esté relacionado con la seguridad de Israel. ¿Así que tal vez trabajaremos en transporte? ” preguntaron sarcásticamente.

Según los autores, los miembros de la comunidad beduina están siendo discriminados en esa área también y no pueden recibir los certificados necesarios.

“Al parecer, hay quienes piensan que un beduino no merece una licencia de conductor de autobús. Parece que el Estado se preocupa de que un beduino llevará a cabo una embestida, por lo que es más seguro no dejar que conduzca un autobús,” continúa la carta.

Los autores afirmaron que en los últimos años, las políticas discriminatorias han generado un menor alistamiento de miembros de la comunidad beduina en en el ejército. A diferencia de los judíos israelíes judíos, los ciudadanos árabes no están obligados a reclutarse en el ejército, aunque muchos miembros de las comunidades beduinas y drusas lo hacen de todos modos.

A principios de este mes, el ejército anunció que nombrará al primer coronel de la comunidad beduina, cuya misión será triplicar el reclutamiento de esa población y integrarlos en el ejército.

La comunidad beduina en Israel cuenta con 250,000 miembros, de los cuales cerca de 1,500 se han reclutado al ejército, según cifras no oficiales.

“Si no detienen este daño a toda la comunidad, veremos un mayor deterioro en el número de reclutas beduinos y no podremos enseñarles que es bueno para ellos enrolarse,” escribieron los autores.

“No permitiremos que la gente que nos envió a derramar nuestra sangre siga escupiendo en nuestra cara. No seguiremos cumpliendo con nuestro deber, si nadie se preocupa por nuestros derechos. No nos reportaremos al ejército hasta sentir que el Estado nos trata como iguales entre iguales y hasta que se nos conceda el derecho a vivir nuestras vidas civiles como cualquier otro ciudadano israelí,” concluyó el mensaje de los reservistas beduinos.

Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico