Yad Lakalá es una organización de mujeres voluntarias de la Comunidad Maguén David que desde hace muchos años ha dedicado esfuerzos a ayudar a jóvenes de la comunidad que desean casarse y que tienen problemas económicos.

Yad Lakalá ayuda a las novias a que tengan su vestido, su ajuar y una boda como todas las mujeres, desde niñas, soñamos con tener.

El 22 de mayo en el Teatro Parque Interlomas, Yad Lakalá presentó una función de danzas y música cuyo tema fueron los cuatro elementos: Agua, Fuego, Tierra y Aire. Mientras tanto, el Rabino Amram Anidjar por medio de un video explicaba la importancia de los elementos en nuestra vida, tanto el lado negativo como el positivo.

Para presentar el espectáculo, Alegre Zaga, Presidenta de Yad Lakalá, explicó: “El tehilim 148, capítulo 8 dice: ‘Alaben a Hashem desde la tierra, las criaturas marinas y todos los abismos. El fuego y el granizo, la nieve y el vapor; el viento huracanado cumple su dictamen. Las montañas y todas las colinas, todo árbol frutal y todos los cedros”.

Luego agradeció la presencia de Jajam Tussie, consejero espiritual de Yad Lakalá, el Sr. Salomón Cherem, Presidente de la Comunidad Maguén David, y la Sra. Dolly Tuachi, presidenta honoraria. “Bienvenidas todas amigas de Yad Lakalá, estoy feliz de poder compartir este día tan especial con ustedes. Decimos en nuestras tefilot: ‘Ose Shalom Bimromav, Hu Berajamav Yaase Shalom Alenu Veal Kol Am Israel’, ‘Él que hace la paz en las alturas, él con compasión haga la paz sobre nosotros y todo Am Israel’.

“Desde que somos pequeñas crecemos con la ilusión de lograr tener una boda y formar un hermoso hogar judío. Sabemos lo que esto significa, así como la experiencia espiritual que representa el matrimonio. Yad Lakalá nos ayuda a volver realidad esa ilusión y a concretar ese sueño. Aprendemos de Jajam Yosef Zonana, autor del libro que tienen en sus manos: Todas las personas y el mundo estamos conformados por los cuatro elementos. Uno de ellos nos predomina y se muestra en nuestra personalidad”.

“En todas las relaciones hay retos, siempre habrá dificultades de uno u otro estilo, y eso no es un impedimento para que la relación tenga éxito, de hecho ese es precisamente el mensaje que H’ nos quiere enseñar, así como los elementos son diferentes, viven juntos y en armonía, también nosotros podemos ser diferentes uno del otro y de todas formas convivir en paz, vivir en armonía y sacar uno lo mejor del otro gracias al quinto elemento más importante que es el amor. Hace unos meses recibí una carta, la cual me provoco una gran sonrisa y le dio un respiro de paz a mi alma, así que quiero compartir un fragmento con ustedes:

Llegó el momento de mi boda, un momento muy esperado, empiezan los preparativos, las carreras, algunas preocupaciones y junto con esto ustedes, con los brazos abiertos, dispuestos a todo y demostrando que son capaces de convertir lo que parecía imposible en posible, no me dejaron por ningún momento, como si fueran a casar a su propia hija. Gracias… es una maravillosa palabra, pero a veces no puede expresarlo todo, cuando viene del corazón, de muy adentro les aseguro, lo significa todo. Gracias… significa que no tendrían por qué haberlo hecho, pero sin embargo les agradezco tanto que haya sido así. Gracias… significa que han hecho algo que jamás olvidaré. Gracias… significa que sin ustedes no hubiéramos salido adelante. Ahora debajo de la jupá, observando mis lágrimas caer, quiero que sepan que muchas de ellas son para ustedes. Le pido a D-os en estos momentos que les dé fuerza para seguir adelante en esta maravillosa labor, que les regale a todas las novias que así lo requieran, la misma oportunidad que tuvimos mi familia y yo. Su labor es única, que D-os los bendiga”.

Una novia

“Siento mucha felicidad al saber que todo el esfuerzo hecho por Yad Lakalá, convierte en realidad el sueño de todas nuestras novias. Quiero agradecer: H’… por permitirme vivir este momento… Jajam Anidjar por su dedicación y apoyo incondicional. A todos nuestros socios donadores ya que su aportación permite que todos los sueños de este evento y de las novias se consoliden. A las voluntarias que con su entrega y trabajo hicieron posible este evento. Hoy estoy segura de que cada novia al salir por la puerta de la sede de Yad Lakalá con una sonrisa en el rostro, su alma en paz y su expectativa llena, es el motor que nos impulsa a trabajar con pasión como el FUEGO, con audacia como el AIRE, con transparencia como el AGUA, y con la firmeza de la TIERRA: los 4 elementos que se convierten en un TODO, para continuar nuestra honorable labor, con el corazón y el alma llena”.