HERB KEINON

La decisión del primer ministro indio Modi de no reunirse con los palestinos en su visita es una muestra de su confianza política

Es un ritual seguido por casi todos los presidentes, primeros ministros y ministros de relaciones exteriores que visitan Israel: vienen al país por 24, 48 o 72 horas, pasan la mayor parte de su tiempo en Jerusalem y Tel Aviv, pero se aseguran de pasar por Ramala o Belén durante unas horas para un par de reuniones con funcionarios de la Autoridad Palestina. De esta manera, la visita puede ser presentada en casa y en el extranjero no como una visita a Israel, sino más bien a Israel-Palestina.

El primer ministro indio, Narendra Modi, que será el primer primer ministro indio en funciones que visita Israel cuando venga aquí en la primera semana de julio para conmemorar los 25 años del establecimiento de relaciones diplomáticas, está dispuesto a romper el molde.

A menos que haya cambios de última hora, Modi vendrá a Israel, punto. Y con este acto enviará un fuerte mensaje a su propio pueblo, a los árabes y a los israelíes, que él – como a los propios indios les gusta describirlo – está quitando el guión de los lazos del país con Israel.

Modi subrayará con este movimiento que los lazos de la India con Israel dependen solo de sí mismos, y son independientes de las relaciones de Israel con la AP o el ritmo del proceso diplomático.

PM Netanyahu y la ministra de AAEE de la India Sushma Suaraj. (Crédito de la imagen: Flickr/ MEAPhotogallery)

Y para Israel esto es enorme, algo que desearía que la Unión Europea emule. En marcado contraste con la India, la UE como órgano -y varios de sus Estados individuales como componentes- han vinculado su ritmo de desarrollo de los vínculos con Israel a la cuestión de los asentamientos o al proceso diplomático. La visita de Modi es una indicación de que los indios no hacen nada de eso.

“Llegamos a la etapa en la que estamos seguros y lo suficientemente cómodos como para poder tratar con los palestinos y los israelíes por separado, por sus propios méritos”, dijo el embajador de la India, Pavan Kapoor, en una entrevista realizada esta semana en su oficina en Tel Aviv. “¿Por qué tenemos que añadirles un guión? Tenemos relaciones independientes con ambos”.

Modi, dijo, hace este viaje histórico porque se siente confiado en su capacidad para hacerlo, a pesar de lo que otros – tanto dentro como fuera de la India – puedan decir, o interpretar.

Y Modi está seguro porque sigue siendo muy popular en la India. Una encuesta de esta semana encontró que tres años después de su elección, el líder del Partido Bharatiya Janata (BJP) – un partido hindú nacionalista de derecha – en total tres de cada cinco indios, o más del 60%, están satisfechos con el trabajo que está haciendo.

Igualmente importante para su confianza, sin embargo, es la estabilidad de su gobierno y su mayoría parlamentaria: el BJP tiene una mayoría absoluta en el parlamento indio, la primera vez que un partido ha sido capaz de gobernar sin coalición desde 1984. Como tal, el partido no es dependiente ni rehén de factores internos y la política por muchas cuestiones, como han sido todos los demás gobiernos de la India durante más de tres décadas.

Y este es definitivamente un factor que permite a Modi hacer una visita de alto perfil a Israel en este momento, una visita que pone fin a lo que The Hindustan Times se refirió como una política de “distancia diplomática y promiscuidad en seguridad” con Israel, refiriéndose a que el país se benefició enormemente de los estrechos lazos de defensa desde el establecimiento de relaciones, pero mantuvo una distancia pública cuando se trató de relaciones diplomáticas.

“Ahora tienen un primer ministro y un gobierno que tiene la mayoría absoluta del pueblo, para que pueda actuar con más audacia y confianza y tomar decisiones”, señaló Kapoor.

Recordando la historia de las relaciones indo-israelíes, Kapoor dijo que a veces ha sido “difícil” tratar de administrar la relación, ya que siempre había quien argumentaba que dado que la India apoyaba la causa palestina, “no debería hacerlo mucho” con Israel.

Pero los tiempos han cambiado.

“Creo que es la sensación de madurez que viene con la nación, y refleja un sentido de confianza y nivel de comodidad cuando se puede decir, ‘No, [apoyar a los palestinos] es algo que seguimos haciendo, pero nuestra relación con Israel es independiente de eso, y debemos seguir apoyándonos y trabajando con ellos porque eso es nuestro interés, y sabes que puedes hacer ambas cosas”.

Y los intereses indios en estos lazos van desde lo concreto y lo obvio -como la defensa masiva y la cooperación tecnológica- hasta tal vez poder aprovechar las fuertes relaciones de Israel con Estados Unidos. Algo más de una semana antes de llegar a Jerusalem, Modi visitará Washington para su primera reunión con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Esta visita se produce en el contexto de desacuerdos entre los dos países sobre temas como el acuerdo climático de París y el comercio. ¿Es la buena relación del primer ministro Benjamin Netanyahu con Trump algo que puede ayudar a la India en Washington?, preguntan a Kapoor.

“Hipotéticamente, sí “, dijo, y agregó que India y Estados Unidos han estado trabajando de cerca durante varios años y que la India está ahora en el proceso de desarrollar conexiones y una relación con la Casa Blanca de Trump. “El hecho es que donde haya países que trabajan en estrecha colaboración, también trabajan con un tercer país; que siempre puede sumar”.

En cuanto a si Nueva Delhi está preocupada de que sus fuertes lazos y ahora de alto perfil con Israel pudieran debilitar los lazos con el mundo árabe, respondió: “Creo que este gobierno es muy franco y abierto con todos sus socios. Y como ustedes pueden ver, el tipo de intercambios que Israel está teniendo con el mundo árabe es increíble. No tiene precedentes en este momento. Así que habla por sí mismo. Desde nuestro punto de vista es tener la comodidad y la confianza de que podemos manejar ambas relaciones de manera independiente”.

En el pasado no sólo preocupaba la reacción en el mundo árabe lo que frenaba la voluntad de la India de avanzar abiertamente sobre sus vínculos con Israel, sino que a varios gobiernos también les preocupaba de qué manera esto afectaría entre los 160 millones de musulmanes de la India, un grupo demográfico que hace de la India, después de Indonesia, el hogar de la segunda población musulmana más grande del mundo.

Cuando se le preguntó si esta gran minoría representa un problema para el gobierno al avanzar con Israel, Kapoor dijo: “Es lo que hace el gobierno”. El gobierno de Modi ha explicado que la India no está “tratando de diluir su posición con los palestinos”, y que Nueva Delhi los apoya cuando siente que tienen un caso fuerte, dijo.

Pero, añadió, “Modi realmente siente que podemos seguir haciendo lo que queremos con Israel, lo cual es en nuestro interés y en el interés de Israel, y seguir adelante en esa luz, pero aún así apoyar a los palestinos donde nos necesiten y donde sintamos que es necesario y merecido”.

El presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas estuvo en la India el mes pasado en una visita que algunos interpretaron como “premio de consuelo” por la próxima visita a Israel, y Modi declaró que el apoyo de la India a la causa palestina era “inquebrantable”. Dijo que India quería ver un estado Palestino junto con Israel, e instó a que se reanudaran las negociaciones de paz.

(Fuente de la imagen: United with Israel, publicada el 18 de abril, 2017,)

Sin embargo, esa posición no significa que la India respalde de manera reflexiva la posición palestina en cada voto que se presente ante cualquier organización internacional. India se abstuvo hace dos meses del voto de la UNESCO que desconectó la soberanía israelí de Jerusalem. Y eso no era sólo un capricho. En los últimos dos años, la India en varias ocasiones – aunque no en todas – se abstuvo, en vez de votar a favor, de las resoluciones anti-Israel.

Dentro de las organizaciones internacionales, Kapoor dijo: “Hay un cierto grado de votación en grupo, en el que ciertas posiciones fueron tomadas por los grupos, y todo actuaron así. Creo que eso está empezando a cambiar, y hemos tomado una decisión consciente de mirar cada uno de estos votos por sus propios méritos, independientemente de lo que otros grupos puedan pensar”.

Sin embargo, los cambios en los patrones de votación no pasan desapercibidos, y los funcionarios diplomáticos israelíes dicen que cada vez que un país no vota sobre temas relacionados con Israel de una manera anti-Israel como se esperaba, ese país sufre una presión considerable de los palestinos y el mundo árabe para “volver a subirse al barco”.

Kapoor dijo que no es como si a la India no le importara el retroceso, sino que cuando el gobierno decide “que así es como queremos hacerlo, lo hacemos. Somos un país razonablemente grande y normalmente no nos dejamos empujar en estos asuntos”.

En los últimos dos años, Netanyahu ha hablado de hacer avances para revertir la mayoría automática de los países que votan en contra de Israel en la ONU, algo que sus críticos han descartado como un sueño, mientras no haya un acuerdo de paz con los palestinos.

Kapoor, sin embargo, no cree que esto sea necesariamente una ambición de castillos en el aire, señalando que Netanyahu ha hecho incursiones significativas con numerosos países. “Sentados aquí, uno ve el tipo de tráfico – jefes de estado y jefes de gobierno – que vienen a Jerusalem. El flujo es bastante impresionante”, dijo. “Eso me da la sensación de que la mayoría automática puede dar la vuelta”.

Estos líderes, señaló Kapoor, vienen por muchas razones diferentes – desde algo tangible a ganar de los lazos con Israel, hasta la comprensión de que Oriente Medio es una parte importante del mundo que es necesario entender y que Israel puede ayudarles a hacerlo.

“Estas visitas”, dijo, “son también un reflejo de la importancia de este país – tanto diplomática como estratégicamente. Esto no se debe subestimar de ninguna manera”.

Cuando Modi llegue el próximo mes, no tiene intención de minimizar la relación Indo-Israelí o la importancia de Israel. Viene a decirle al pueblo israelí de una manera clara y abierta, dijo Kapoor, que la India es un socio genuino y estratégico, y que “queremos trabajar con ustedes”.

Fuente: The Times of Israel – Traducción: Silvia Schnessel – Reproducción autorizada con la mención siguiente: © EnlaceJudíoMéxico