Enlace Judío México – Sucot es conocida como “la fiesta de la alegría” una “época de regocijo”. Durante estos días la felicidad que sentimos funciona en crescendo; día con día incrementa hasta llegar a un punto cúspide al final de la semana la cual culmina con una doble celebración. Empieza un día en el que coinciden dos festividades Sheminí Atzeret y Simjat Torá. Aunque ambas se relacionan a Sucot, cada una tiene un estatus independiente como una fetividad individual.

Sheminí Atzeret es el último día de Sucot, se celebra el final de la semana y la culminación del pacto que establecimos con D-os desde Rosh Hashaná. Mientras que Simjat Torá celebramos que concluimos la lectura anual de la Torá y empezamos un nuevo ciclo al leerla. Si bien coinciden en el mismo día ambas se refieren a dos cosas distintas y como tal son tomadas en cuenta.

Sheminí Atzeret

La Torá nos dice que “por siete días deberán habitar una Sucá, y el octavo día será para ustedes Atzeret (un cierre).” Éste día debe considerarse como un día aparte de las celebraciones de Sucot, la Torá hace hincapié especial en este punto.

Describe con gran detalle los sacrificios que deben ser llevados durante los días de Sucot. Marca que los 70 toros que se ofrecen en el templo a lo largo de los 7 días que dura esta fiesta representan las 70 naciones del mundo. Mientras que en Sheminí Atzeret únicamente es llevado un toro que representa al pueblo de Israel. El día se separa así como el pueblo judío se separa de las demás naciones.

El Talmud usa una historia para explicar este día. Se habla de un rey que ofreció un banquete de varios días a los pueblos que habitaban sus tierras. Al final del banquete invitó a su amigo más cercano a que se quedará un día más y pudieran celebrar juntos, ellos dos solos. Así se ve Sheminí Atzeret, durante una semana D-os celebra con todas las naciones y todas sus criaturas, pero el último día, un día aparte, celebra con sus seres queridos.

Simjat Torá

En Simjat Torá terminamos nuestro ciclo anual de lectura de Torá e inmediatamente después empezamos uno nuevo. Leer toda la Torá es una fuente de gran alegría, para demostrar nuestra felicidad extrema bailamos con la Torá haciendo círculos alrededor de la Bimá (estructura sobre la cual se lee la Torá) haciendo siete circuitos (hakafot). Cantamos, bailamos y nos deseamos unos a los otros “lejaim” (vida), mientras brincamos en círculo alrededor de la Bimá. No hay felicidad más grande que la felicidad de tener en nuestras manos la Torá.

Muchos se preguntan por qué no hacemos este tipo de celebraciones durante Shavuot, el día en que celebramos haber recibido la Torá.

Nuestros Sabios contestan que sólo tras un tiempo en que el pueblo tuvo cerca ala Torá pudieron apreciar la grandeza de este regalo. Esa es la razón por la cual la alegría de Simjat Torá es tan desbordante y abrumadora. Es más nuestros sabios señalan que la santidad del día impregna de tal forma la atmosfera a tal punto que ni siquiera tenemos que abrir el arca para celebrar a la Torá y sentir su santidad. Bailamos con ella simplemente para señalar cuanto la amamos.

Información tomada de askmoses.com