Enlace Judío México – Nitsana Darshan-Leitner, cabeza de Shurat HaDin, considera que pese a que es difícil demostrar el nexo entre un llamado a boicot y la realización de uno, en este caso sí se ha materializado por lo que tiene esperanzas de que los jueces le otorguen una sentencia favorable.

La organización legal israelí Shurat HaDin lleva una demanda contra dos neozelandesas por convencer a la cantante pop Lorde para cancelar su concierto en Israel, en lo es el primer litigio en virtud de una polémica por el boicot en contra de Israel.

La ley anti-boicot promulgada en Israel en 2011 abre la puerta a demandas civiles contra cualquier persona que pida un boicot contra Israel. La ley faculta a los tribunales para imponer daños y perjuicios contra los acusados.

Las neozelandesas Justine Sachs, una judía de hecho, y Nadia Abu-Shanab, de origen palestino, escribieron una carta abierta a Lorde el año pasado en la que le pedía que “tomara una posición” y “se uniera al boicot artístico contra Israel“. Ante una respuesta de Lorde en la que simplemente dijo en un primer momento, “¡Tomo nota!”, la artista terminó por comunicar días después la cancelación de su presentación.

Shurat HaDin, que lidia primordialmente con litigios en defensa de Israel y la Diáspora, afirma que las neozelandesas sabían que su carta podría desencadenar un boicot real. El grupo, que presentó la demanda en un tribunal de Jerusalén el martes, está demandando en nombre de tres adolescentes que habían comprado boletos para el concierto, por unos 13 mil dólares en daños y perjuicios.

“Esta demanda es un esfuerzo para dar consecuencias reales a quienes apuntan selectivamente a Israel y buscan imponer un boicot injusto e ilegal contra el Estado judío“, dijo Nitsana Darshan-Leitner, la abogada cabeza del grupo que representa a las chicas. “Deben de compensar a las ciudadanas israelíes por las lesiones morales y emocionales y la indignidad causada por sus acciones discriminatorias”.

Darshan-Leitner, autora de una reciente publicación sobre el combate legal a la financiación del terrorismo en Israel, dijo que la ley aún no ha sido aplicada a algún caso en tribunales porque es difícil demostrar ante los jueces un vínculo entre un boicot real producido y un simple llamado a promoverlo como marca la ley. Pero ella considera que en este caso la conexión es clara, afirmando que la primera vez que Lorde planteó sus reservas sobre el desempeño de Tel Aviv fue después de la carta y debido a que las ambas “tomaron el crédito” por la decisión de Lorde de cancelar en las redes sociales y en otros lugares.

La ley de 2011 es una de las medidas que Israel ha tomado en los últimos años para combatir un movimiento internacional que aboga por boicots, desinversiones y sanciones contra el estado judío.

 

Fuente: The Times of Israel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico