Enlace Judío México.- La Semana Internacional de la Dramaturgia 2018, en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, es un evento organizado por el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León (CONARTE) que se llevó acabo del 12 al 17 de abril sobre el escenario de la gran sala del teatro de la ciudad, evento que llegó este año a su séptima edición.

MARISA GARZA

El público abrazó la semana con una excelente participación.

Una de las obras presentadas con rotundo éxito fue “Testigo de la Historia” escrito por la dramaturga regiomontana Thelma Sandler Zack.

Basado en un hecho histórico, sin caer en una monótona biografía, se nos cuenta cómo es que Gilberto Bosques fue enviado desde México hacia Francia como Cónsul General y cómo durante el tiempo que estuvo en este puesto tuvo la oportunidad de salvar aproximadamente a 4,000 refugiados.

La autora se vale de este hecho histórico para rendir homenaje a México además explorar los puntos de coincidencias de dos culturas como lo son la mexicana y la judía, un texto donde se ve reflejado el respeto, la investigación y el espíritu de su autora.

Se presentó el lunes 16 de abril a las 20:30 horas, en esta lectura en particular se suscitó un lleno absoluto incluyendo escalones y público de pie, además, un gran número de personas se quedaron fuera del recinto.

El texto es un ramillete de temas que van desde el Holocausto, la identidad, la migración, culturas, valores humanos, familia y colaboración. Un claro contraste de lo que es capaz de hacer el odio de un hombre buscando exterminar a un pueblo y lo que es capaz de hacer un hombre por amor a sus semejantes, poniendo en riesgo su vida y la de los suyos.

El eje central es Gilberto Bosques (1892-1995) quién fue enviado a Francia por el entonces presidente de México, el general Lázaro Cárdenas, y quién estaba viviendo en Marsella cuando Alemania invadió a este país.

La pieza entrelaza dos historias: la de una familia judía que busca huir de la persecución nazi, y la vida de Gilberto Bosques. Por medio de imágenes y metáforas muy intensas, los hechos históricos sucedidos durante la Segunda Guerra Mundial son traídos al escenario.

La pieza teatral se prolonga por una hora y media, y todo este tiempo la tensión atrapa al espectador y no lo suelta, no tiene piedad y éste es estrujado hasta la última fibra de su ser.

Al finalizar la lectura (siendo éste el propósito del ciclo) el micrófono se abre al público el cual, en este caso, logró conectar y conmoverse con el texto. Esto se hizo muy notorio en las innumerables ocasiones en las que se felicitó a la autora. Una joven del público le comentó que era la primera vez que asistía al teatro y le pedía que más personas pudiesen ver esta obra, que la presentase en otros sitios y otras ocasiones. Otra persona del público preguntó: ¿Cómo es posible que en Monterrey la televisión local sea una basura, y nuestro teatro una joya?

Los comentarios de viva voz fueron también para felicitar al director Rafael Félix, que nos entregó un trabajo impecable, realzando el contenido del texto y -sin excepción- al magnífico trabajo del reparto: a los actores Calixto Valdez, Jerónimo Garza, Marilú Martínez, Mauro Samaniego, Migdal Elizondo y Susy Alanís quién con un demoledor monólogo quebró en dos el corazón de los presentes.

El diseño de iluminación fue de Erika López, quien logró un marco perfecto para hacernos a todos los allí presentes “Testigos de la Historia”.

Felicidades a todo el equipo del Teatro de la ciudad, a CONARTE y al Lic. Roberto Villarreal, por el éxito de la semana, el público llenó las salas, y se generó un espacio ideal para el intercambio de ideas y crecimiento entre escritores emergentes con figuras reconocidas de renombre nacional e internacional.