Enlace Judío México.- El Asperger es un tipo de autismo en el que las personas que lo padecen tienen ciertas dificultades de interacción social, de lenguaje y presentan algunas conductas obsesivas.

GINA HALABE PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO

El Dr. Hans Asperger fue un psiquiatra, investigador y profesor de medicina vienés que desde muy joven se dedicó a estudiar los diferentes trastornos y desórdenes mentales, sobre todo en niños. Sin embargo, no es hasta después de su muerte que sus estudios empezaron a ser reconocidos a nivel internacional.

Quienes lo conocieron lo describen como un niño solitario, y de acuerdo a sus características, la gente ha llegado a decir que él presentaba ciertos síntomas del síndrome que lleva su nombre. Estudió medicina en Viena, concluyendo sus estudios en 1931.

Asperger describió la “psicopatía autista” donde habla de un patrón de comportamiento que detectó en cuatro pacientes y de acuerdo a los síntomas que observó a estos niños los denominó “pequeños profesores” por la habilidad con la describían sus intereses.

Pero hay un lado oscuro en este doctor que logró comprender a estos pequeños: colaboró con el régimen inhumano, cruel y violento más conocido, el nazismo.

Durante la Segunda Guerra Mundial fue oficial médico. Si bien sabemos, los nazis tenían el anhelo y la ambición de dominar el mundo, y lo estaban logrando en Europa, pero conforme avanzaba la guerra, con la entrada de los Aliados, el conflicto dio un giro de 180°. Fue una época que, en condiciones inhumanas, en este anhelo de poder, se hicieron algunos descubrimientos que han contribuido al mundo médico contemporáneo, con esto no solo nos referimos a los nazis, tenemos el claro ejemplo del doctor holandés y la enfermedad celíaca.

Dentro del régimen nazi las imperfecciones eran inaceptables y crearon un programa de “purificación”, un programa de eutanasia.

El historiador Herwig Czech se ha dedicado a estudiar el archivo histórico de la Universidad Médica de Viena, dentro de este archivo se encuentran documentos científicos y documentos personales del Dr. Asperger cuyo estudio está limitado a cierta gente, no todos tienen el acceso para verlos. Tras años de estudio, análisis e interpretación del historiador, se llegó a la conclusión de que el doctor fue un activo colaborador nazi.

Asperger tuvo una amplia colaboración con el régimen del Tercer Reich en el programa de eutanasia, registrando en sus documentos personales el traslado de 800 niños de Viena con discapacidad, además de apoyar públicamente el concepto de “higiene racial”, el destino de estos niños fue cruel e inhumano, muchos murieron de inanición, otros tantos por la aplicación de una inyección letal.

Y es aquí donde entró en conflicto, cómo vivir en esa dualidad, llamando a tus niños “pequeños profesores” y mandando a otros tantos a su muerte solamente por nacer con alguna capacidad distinta a lo “normal” y a cambio de qué, ¿de algunas oportunidades laborales? En vida sus trabajos nunca fueron reconocidos más allá de Viena.

El grado de participación de Asperger en la selección de los niños más vulnerables de Viena ha permanecido como una cuestión abierta e inquietante en la investigación del autismo durante mucho tiempo.

Al final, la concepción que se tiene de este talentoso pediatra cambia tras conocer la verdad. ¿Quién se cree el ser humano para juzgar quién merece vivir o quién no?, siendo éste el que comete tantos errores conscientemente, quien es capaz de ir por encima de los suyos no importando el parentesco, si son niños, ancianos o mujeres, con tal de satisfacer sus intereses vanos. Cuando el poder y la ambición te ciegan y atentas contra la inocencia, contra el talento y la humanidad.