Enlace Judío México e Israel – Miembros de la Knéset de todo el espectro político celebrarán una sesión de emergencia el miércoles para exigir al gobierno que otorgue reconocimiento oficial a los movimientos no ortodoxos en respuesta a la masacre en una sinagoga conservadora de Pittsburgh hace una semana.

JUDY MALTZ

La invitación a la sesión titulada “Es hora de igualdad” fue firmada por seis legisladores. “El antisemitismo no nos definirá. Es hora de un pacto de hermandad, en lugar de un pacto de sangre, entre todas las comunidades del pueblo judío”, afirma.

El propósito de la sesión, de acuerdo con la invitación, es “crear vínculos más fuertes entre Israel y la diáspora, promover la tolerancia religiosa y hacer que el Estado de Israel reconozca todas las corrientes del pueblo judío”. Esta última es una referencia a la movimientos no ortodoxos.

La invitación fue firmada por dos miembros de la coalición y cuatro miembros de la oposición. Michael Oren, ex embajador en Estados Unidos quien ahora se desempeña como viceministro en la Oficina del Primer Ministro, y Rachel Azaria, ambos miembros de la coalición, son representantes del partido de centro derecha Kulanu.

Se espera que unos 20 legisladores, entre ellos varios miembros del partido gobernante Likud, asistan a la sesión, donde se presentarán los resultados de un nuevo estudio que muestra que en los últimos años, un creciente número de israelíes ha comenzado a identificarse con los movimientos no ortodoxos. Según la encuesta, realizada por el Instituto de Política del Pueblo Judío, alrededor del 13 por ciento de los israelíes se identifican con los movimientos reformista y conservador. Sin embargo, pocos son miembros de esas congregaciones.

Israel no reconoce los matrimonios realizados por rabinos reformistas y conservadores, y los individuos convertidos por estos rabinos no pueden contraer matrimonio en el país. Las instituciones dirigidas por el judaísmo progresista en Israel reciben sólo una pequeña fracción de los fondos asignados a los que están bajo el control ortodoxo.

En respuesta a la iniciativa, Yizhar Hess, director ejecutivo del Movimiento Conservador en Israel, dijo: “Me niego, y siempre me negaré, a permitir que un asesino despreciable decida por nosotros quién es judío. Pero el antisemitismo tiene su propio método de contabilidad”. Refiriéndose a ataques anteriores contra judíos en Israel que rezan en sinagogas ortodoxas y yeshivas, señaló que los cuerpos de las víctimas “están en una sola línea. Ya hemos tenido suficiente con la discriminación contra los movimientos no ortodoxos. Esto debe decirse alto y claro: es hora de reconocer. Es hora de la igualdad”.

Fuente: Haaretz / Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico