Enlace Judío México e Israel.- La principal cámara de apelaciones de la CPI reabrió el lunes el caso de las acusaciones de crímenes de guerra relacionados con la flotilla ‘Mavi Marmara’, pero la fiscal aún podría decidir no avanzar.
YONAH JEREMY BOB
La principal sala de apelaciones de la Corte Penal Internacional volvió a abrir el caso de las acusaciones de crímenes de guerra relacionados con la flotilla Mavi Marmara de 2010.
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Después de años de intentar perseguir a altos funcionarios políticos y militares israelíes en los tribunales turcos y europeos y ante la CPI, por la muerte de 10 activistas de la Fundación Humanitaria de Socorro IHH, muertos por comandos de la Armada de Israel, la decisión dividida de la Cámara de Apelaciones de la CPI mantiene el caso vivo, aunque eso no significa que Israel perderá.
La fiscal de la CPI, Fatou Bensouda, puede ir más allá con la investigación criminal de Israel, o puede decidir tratar de cerrar el caso por tercera vez, aunque su base para hacerlo se haya reducido.
La incursión del Mavi Marmara en 2010 vio a un grupo de activistas de derechos humanos, combinado con un grupo más pequeño de activistas de IHH, que el informe de la Comisión Turkel del cuasigubernamental identificó como afiliado a la Hermandad Musulmana, abordar varios barcos en un intento de romper el bloqueo de Israel a Hamás en Gaza.
El caso, presentado por los aliados turcos de IHH en las Islas Comoras, ha estado entre los más controvertidos dentro del sistema de la CPI, con múltiples votos divididos y múltiples rondas de apelaciones.
En noviembre de 2014, Bensouda intentó cerrar el archivo por primera vez, diciendo que si bien la conducta de las FDI en el incidente le parecía mostrar elementos de crímenes de guerra, los 10 activistas liquidados simplemente no constituían un recuento de cuerpos lo suficientemente alto como para justificar su participación, ya que ella se enfoca en asesinatos en masa.
Bensouda decidió finalizar su revisión de la incursión de Mavi Marmara en una etapa preliminar, sin ordenar una investigación criminal completa, y mucho menos presentar acusaciones. Esto fue visto por el lado pro-Israel como una primera victoria de la CPI.
Pero luego, la Sala de Juicios del tribunal votó en contra de Bensouda en un fallo dividido 2 a 1 sobre cómo manejar el ataque de la flotilla, ordenándole abrir una investigación criminal completa.
La fiscal apeló a la Cámara de Apelaciones de la CPI y obtuvo un resultado mixto en noviembre de 2015.
En una votación cercana de 3 a 2 en contra de la apelación de Bensouda, la Cámara de Apelaciones le ordenó revisar sus conclusiones por segunda vez, buscando información más amplia disponible, pero la autorizó a tomar la misma decisión siempre y cuando realizara esa revisión.
En noviembre de 2017, nuevamente decidió cerrar el caso contra los soldados de Israel.
Después de revisar información adicional, explicó que, aun cuando “hay una base razonable para creer que algunos miembros de las Fuerzas de Defensa de Israel cometieron crímenes de guerra … ningún caso potencial que surja de esta situación puede, legalmente hablando, considerarse de ‘suficiente gravedad’ … por lo tanto, salvo la apertura de una investigación“.
Crucial para su decisión fue su descubrimiento de que “no había una base razonable para creer que los delitos identificados se cometieron a gran escala o como parte de un plan o política“.
Comoras apeló nuevamente, y en noviembre de 2018, la Cámara de Primera Instancia de la CPI ordenó nuevamente a Bensouda que reconsiderara su decisión en una decisión dividida por 2-1.
Apeló nuevamente a la Cámara de Apelaciones, lo que llevó a la decisión del lunes.
Anteriormente, Israel logró cerrar una serie de otros casos internacionales contra el estado judío con respecto a la flotilla. Turquía cerró sus casos contra Israel después de que los dos países llegaron a un acuerdo en agosto de 2016. El caso de la CPI fue el último de los grandes casos que permanece abierto.
Mientras Israel se apoderó y detuvo la mayoría de los barcos sin incidentes, los comandos de la Armada de Israel abordaron el Mavi Marmara y fueron atacados por activistas de IHH, provocando la lesión de algunos comandos y la muerte de 10 activistas de IHH.
Turquía y muchos otros en la comunidad internacional acusaron a Israel de crímenes de guerra. Pero la Comisión Turkel y el Informe Palmer patrocinado por la ONU no solo liberaron a Israel de dichos crímenes, sino que validaron algunas de las afirmaciones de Israel de luchar en defensa propia. El Informe Palmer dijo que parte del uso de la fuerza por parte de las FDI fue excesivo.
La queja de crímenes de guerra a la CPI en el caso provino de las Islas Comoras en mayo de 2013. Debido al bufete de abogados que presentó la queja, muchos vieron a las Comoras como la encargada del problema en nombre de varios contactos de IHH-Turquía.
El supuesto examen preliminar de los supuestos crímenes de guerra de Bensouda de la guerra de Gaza de 2014 y la empresa de asentamientos aún están abiertos, aunque hay indicios de que en noviembre o diciembre puede anunciar acontecimientos importantes.
Fuente: The Jerusalem Post – Reproducción autorizada con la mención: ©EnlaceJudío
