Enlace Judío México e Israel – En ausencia del autor, se presentó En aguas profundas I, donde el sabio de origen egipcio hace un recorrido por la historia de su vida, por la Cabalá y por el fascinante mundo del conocimiento. 

Con un “ejercicio de imaginación”, inició la presentación del libro En aguas profundas I, del rabino Selim Cabasso, realizada en el marco de la Feria Internacional del Libro Judío 2019. La presentadora Abigail Jottar encarnó al autor al dar lectura al texto que este preparó para la ocasión y que nosotros reproducimos para ti a continuación.

 

Agradecemos profundamente la atenta invitación que nos hizo la Feria del Libro Judío para presentar nuestro libro en esta emisión, esperamos ser capaces de aportar nuestro grano de arena a esta linda iniciativa de ustedes y estar presentes en las siguientes.  

Es bien conocido el dicho que recomienda al ser humano, que en el curso de su vida plante un árbol, tenga hijos y escriba un libro.El origen de estas palabras es en realidad oscuro y hay muchas versiones de quien lo dijo.

El individuo que planta un árbol, demuestra ser una persona altruista, buena y generosa, porque él va a tener que cuidarlo, sin estar seguro quiénes aprovecharán cuando esté listo para dar frutos o para abrigar con su sombra a un viajante de los rigores del clima. Lo más probable es que él mismo no sacará provecho de las bondades de los frutos o de la sombra del árbol pero le queda la satisfacción de que otros seres lo aprovecharán.

De la misma manera, podemos interpretar el hecho de tener hijos como un esfuerzo para tener una descendencia ejemplar quien aplicará las buenas costumbres aprendidas en el seno de la familia de sus papás y servir de ejemplo de buen comportamiento para las demás generaciones.

Tener hijos y criarlos no es una tarea fácil y esto demuestra las buenas intenciones de esta persona con tal de que sea un servicio a la humanidad.

El Pueblo judío es reconocido como el Pueblo del Libro. La palabra “libro” etimológicamente proviene de la misma raíz de la palabra “libertad” que demuestra que a través de los libros se adquiere la manera de quitarnos las cadenas de la esclavitud y de la ignorancia. El ser libre es realmente así porque a través de uno o varios libros, se adquiere sabiduría o conocimientos que permiten liberarse de cualquier creencia o idea falsa para ponerlo en el camino correcto y ayudar a clarificar los pensamientos hacia la perfección. Una libertad positiva bien razonada, conduce al bienestar y a la paz de todos.

Un libro es un tesoro. Tener una colección de libros de diferentes temas es maravilloso y por esto el que de veras aprecia coleccionarlos, les tiene un cuidado excesivo para conservarlos y un cariño muy especial como si fueran sus hijos.

Cuántas veces hemos oído a unas personas que han reconocido, que gracias a la lectura de un libro determinado, han cambiado para mejorar el curso de su comportamiento y de su vida, y que esto ha significado una vuelta de ciento ochenta grados para la conducción de su futuro; es por esto que queremos sugerir a nuestros queridos amigos, que en el momento que se encuentren ante la disyuntiva de no saber qué regalar, por ejemplo “¿Qué regalo escogeré para un ser querido en ocasión de su cumpleaños o de su graduación o de su boda?” o “¿Qué regalaré para cualquier ocasión alegre a mi prójimo?” Que la respuesta sea siempre: regalaré un libro.

A veces existe la intención de hacer un regalo de más valor monetario como un aparato electrónico, una joya, un reloj o cualquier otra cosa; en nuestra sugerencia una cosa no impide la otra, es decir, pueden hacer el otro regalo pero que siempre esté acompañado como regalo espiritual de un buen libro, de esos que suelen  llamar “indispensable tener en casa” interesante y de gran utilidad. Por ejemplo, unos diccionarios u obras de varios tomos, que servirán de consulta o de referencia para muchas ocasiones.

Es interesante observar que en el curso de la historia del mundo, tanto antigua como moderna, las diferentes ocasiones donde las hordas salvajes e ignorantes han tratado de quemar libros de un valor incalculable y bibliotecas enteras. Esta  costumbre terriblemente mala, se ha repetido en nuestras épocas actuales, como sucedió en los pogroms de Asia, Rusia y Europa del este, como también en los tiempos de los nazis de la Alemania hitleriana, que pretendía constituir una “raza” superior en todos los sentidos y lo único que comprobó era su barbarie y su salvajismo, quemando los libros sagrados de las doctrinas bíblicas.

Esta quemazón, nos comprueba que nunca lograrán hacer desaparecer filosofías sublimes y pensamientos altísimos que han sido incluidos en esos libros. Por este motivo, podemos afirmar que los libros son eternos y que siempre habrá uno o muchos que se salvarán de estar eliminados y afortunadamente se seguirán multiplicando por todas partes. Es un hecho comprobado que el progreso, la civilización y la cultura de una nación, se miden a través de la cantidad de libros editados por esta y que atascan sus librerías.

Es un hecho conocido que ha habido personas, de pocos recursos, que han preferido ahorrar en su alimentación y no escatimar dinero para comprar un libro. Según el conocimiento y la filosofía universal, es más importante alimentar el alma y el espíritu, que engordar el cuerpo.

La cultura general es conocer y poder hablar de varios temas en varias ocasiones, ella te abre las puertas para estar bien recibido en múltiples reuniones que hablan de varios temas. La única manera de ampliar los conocimientos que te permitirán adquirir esta cultura es a través de la lectura y el estudio de una gran variedad de libros. Para llegar a ser culto y difundir la cultura es indispensable hacer uso de la lectura de muchos libros, y es donde la iniciativa del grupo aquí presente, de hacer una feria de libro judío se vuelve muy loable, diría yo, indispensable para fomentar la costumbre maravillosa de la lectura en todos sus temas para poder llegar a ser personas cultas.

Ser culto es tener una idea amplia del mundo, de su historia y de las creaciones del ser humano (científicas, religiosas, políticas, artísticas, etc.) Su contrario es la ignorancia.

Ser culto es ser ‘cultivado’, es decir, desarrollar y refinar no solo la inteligencia cognitiva, sino la sensibilidad estética y espiritual, la lucidez ética, la capacidad de comunicación, la urbanidad y su contrario es la tosquedad.

Ser culto es tener los conocimientos y competencias necesarias para comprender lo que sucede —o lo que nos sucede—, para encontrar soluciones a nuestros problemas, y para ejercitar el pensamiento crítico que nos libre de fanatismos y de adoctrinamientos. Su contrario es la simpleza y la credulidad.

Fomentar la lectura de varios libros y periódicos es el único camino para lograr ser culto, es ser observador; consulta el diccionario constantemente, consulta y extrae todo lo bueno de las personas, conversa con las personas más grandes o más chicas siempre podrás aprender algo nuevo. El ser culto permite dejar a un lado la ignorancia y poder sobresalir del resto; recuerda que pierdes la ignorancia, pierdes la tosquedad, pierdes la violencia y ganas la paz y la armonía con tus semejantes.

Con esto, creo que es la solución para eliminar la violencia y la inseguridad en cualquier región del mundo, principalmente en nuestro país.

En conclusión, sugerimos atentamente a nuestros queridos lectores, que regalen este alimento espiritual del alma, que está contenido en los libros, que se renueva cada vez que se lee y nunca acaba de nutrir completamente a todos los seres humanos que practican la lectura. 

Reiteramos nuestras felicitaciones al Comité Ejecutivo de la Feria del Libro Judío, deseándole mucho éxito y pidiendo al Eterno que les colme de bendiciones.

En aguas profundas

Cualquier libro contiene ideas y pensamientos que hablan por sí solos. También es una manera de llevar un mensaje. En esta obra titulada “En aguas profundas I” se trató de simplificar las respuestas a muchas preguntas que nos hacemos grandes y chicos para poder simplificarlas al grado de que puedan ser entendibles por chicos y grandes y satisfacer en lo posible a los exigentes. Es por eso que después de dar a conocer lugar y fecha de nacimiento del autor y de su infancia hasta los trece años el se dedica, en su calidad de abuelito, a responder a sus nietos las preguntas que le hacen para después dar una explicación de dos partes muy importantes del rezo diario y se termina con una traducción que contiene de vez en cuando definiciones esotéricas sobre otra parte de igual importancia que es el Kadish.

Aprovecho esta ocasión para hacer un comercial: están por salir otros tres libros que son los siguientes, uno “Aguas Profundas II”, el segundo “En aguas someras” y el tercero un libro sobre “Éshet Jháyil” la mujer ejemplar, también está listo un libro de estudios de concinología y de recetas combinadas de comida mediterránea y comida mexicana. Espero que sean de su agrado y en el caso de que quieran hacerme un comentario al respecto de cualquier de ellos, pongo a sus órdenes el siguiente mail: [email protected].   

 

Tras la lectura del texto, el otro presentador, Mauricio Weill, dijo que era un honor para él tener la oportunidad de hablar en nombre de su maestro de Cabalá, Selim Cabasso. Luego de narrar el origen de dicha disciplina y de cómo a través de ella pudo conocer a Cabasso, Weill dijo que “este material nos llevó cinco años terminarlo”.

Luego hizo un repaso por distintos pasajes aparecidos en los capítulos que comprenden el libro.

 

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