Enlace Judío México e Israel – Dados los recientes eventos en el Medio Oriente, nuestros líderes se beneficiarían de la sabiduría del Libro de Esther.

JOHN HAGEE

A pesar de que el nombre de Dios nunca aparece en el libro, la historia de Esther nos muestra que Él siempre protegerá al pueblo de Israel de cualquier peligro. Esta historia también nos recuerda que Dios llama a la gente común a ayudar en este llamado justo.

De hecho, la Palabra de Dios está llena de ejemplos de individuos comunes y defectuosos que ahora son inmortalizados como héroes de la fe – todo debido a su voluntad de ser utilizados por Dios para el beneficio de Su pueblo. Abraham era desobediente, Moshé era un rebelde que tartamudeaba, David era el más joven y el bajo de la familia, Esther era huérfana. Todas estas personas cambiaron la trayectoria del mundo no porque fueran perfectas, sino porque eran valientes y estaban dispuestas a seguir adelante.

Desafortunadamente, los enemigos de Israel no desaparecieron con Amán y sus hijos, o los cobardes nazis de la Segunda Guerra Mundial. Los enemigos modernos de Israel adoptan formas más insidiosas que sus predecesores, y recientemente algunos de ellos obtuvieron visas a Estados Unidos para asistir a la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Aunque que el Libro de Esther relata la historia antigua, sus principios siguen siendo actuales hoy en día. El presidente de Irán, Hassan Rohani, y el ministro de Exteriores, Mohammad Javad Zarif, son los Amanes modernos. Al igual que Amán el Agagueo, no han sido discretos sobre sus planes para Israel y el pueblo judío. De hecho, las armas de Irán están grabadas con las palabras “muerte a Israel”. Entonces, ¿qué estamos dispuestos a hacer al respecto?

El Libro de Esther provee una guía. Recordemos las palabras de Mordejai a su prima Esther (4:13-14). Le dice que si ella no defiende al pueblo judío, vendrá ayuda, aunque no será considerada inocente: “Porque si guardas silencio en este momento, habrá alivio y liberación para los judíos de otro lugar, pero tú y la casa de tu padre perecéis. Sin embargo, ¿quién sabe si has venido al reino para un momento como este?”

Para el creyente, esto no es meramente alegórico. La historia ha demostrado una y otra vez que Dios mantiene la promesa de Génesis 12 de bendecir a los que bendicen a Israel y maldecir a los que no lo hacen.

Como cristianos, a menudo nos enfocamos en la bendición, pero Dios no incluyó la mención de la maldición. Los enemigos de Israel sellan su propio destino cuando planean dañar al pueblo judío. Faraón y sus hombres se ahogaron en el Mar Rojo, así como los egipcios habían ahogado a los varones judíos recién nacidos. Goliat fue conquistado por David. Y Amán, el enemigo de Esther, colgó de la misma horca que construyó para Mordejai.

La dictadura de Teherán busca la desaparición de Israel. En lugar de invertir en la construcción de su sociedad, invierte en la destrucción de las sociedades de otros, específicamente de Israel. Y ese será el fin de los mulás, porque creo que un día el pueblo de Irán se levantará y recuperará su país.

Tengo fe en que esto sucederá porque la historia ha demostrado desde hace mucho tiempo que tal es el arco de la tiranía. Pero, ¿actuaremos como estadounidenses en este momento crucial de la historia? Y hasta que llegue ese día, ¿apoyaremos a nuestra nación, a los que dentro de Irán buscan un nuevo camino a seguir, o prestaremos la estatura de nuestra nación a los verdugos del pueblo?

Soy un hombre de fe, y como tal, me tomo muy en serio las palabras que Mordejai le dijo a su sobrina. Oro para que los líderes de Estados Unidos ejerzan su poder con la prudencia de Esther. Sí, invitó a Amán a cenar, pero no sin antes planear su derrota.

El pastor John Hagee es fundador y presidente de Cristianos Unidos por Israel.

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