Enlace Judío México e Israel – Un día como hoy, 9 de julio pero de 1942,  Ana Frank y su familia se ocultaron en un ático sobre la oficina de su padre en un almacén de Amsterdam.

Allí vivieron durante la ocupación alemana, desde el 9 de julio de 1942 hasta el 4 de agosto de 1944, abundan rumores de que todos los judíos deben abandonar los Países Bajos.

Ante el desolador panorama en los Países Bajos, los padres de Ana, Otto y Edith Frank deciden mudarse a Ámsterdam.

Otto Frank comienza allí una compañía que se dedica al comercio de pectina, una sustancia para la preparación de mermelada.

Margot de 16 años, hermana mayor de Ana, recibe un aviso el 5 de julio, 1942 para presentarse a trabajar en Alemania, sus padres desconfían. No creen que se trate de trabajo y deciden esconderse al día siguiente.

En la casa de atrás de su compañía en la calle Prinsengracht 263, el padre de Ana acondicionó un escondite. No mucho tiempo después llegan cuatro personas más para esconderse con la familia Frank.

Dos años más tarde, el 4 de agosto de 1944, oficiales de policía descubren el escondite y arrestan junto con los demás escondidos a toda la familia Frank.

La policía también arresta a dos de los protectores.  Hasta el día de hoy, no se sabe cuál fue el motivo para la incursión policial.

De las 8 personas que se escondían en ese lugar, solo sobrevivió el padre de Ana, Otto Frank.

El padre de Ana, Otto Frank, no sabía de la existencia del diario que escribió Ana durante el encierro, hasta que una de las personas que les ayudó a esconderse se lo entregó en julio de 1945.

Dos años más tarde, Otto logró publicar el diario. Lo tituló ‘Het Achterhuis’, “La casa de atrás”, la primera traducción del diario en español fue en abril de 1955, bajo el título “Las habitaciones de atrás”.

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