Enlace Judío – El líder del partido Tikvá Jadashá, Gideon Sa’ar, instó el martes al jefe de Yesh Atid, Yair Lapid, a “dejar el ego a un lado”, en un aparente llamado a permitir que el jefe de Yamina, Naftali Bennett, se desempeñe como primer ministro en un posible nuevo gobierno conformado por los partidos opositores a Benjamín Netanyahu.

Lapid, cuyo partido centrista es el más grande en el bloque anti-Netanyahu, se ha reunido con varios líderes de partidos en los últimos días como parte de los complejos esfuerzos para levantar una coalición de gobierno tras las elecciones. Hasta ahora ha recibido el respaldo de los partidos Yisrael Beitenu, Avodá y Meretz para formar el próximo gobierno.

Antes de las elecciones del 23 de marzo, Bennett descartó unirse a un gobierno encabezado por Lapid, al igual que Sa’ar. Yamina solo tiene 7 escaños, pero no se ha comprometido ni con el bloque pro ni el anti-Netanyahu.

“La noche de las elecciones… anuncié que trabajaríamos sin ego para formar un gobierno de cambio. Hoy es mi deber: el juego de recopilar recomendaciones no conducirá a la formación de un gobierno, solo lo hará un esfuerzo decidido y rápido para establecer una mayoría parlamentaria realista”, tuiteó Sa’ar este martes, recogió The Times of Israel.

Añadió: “La ventana de oportunidad es limitada. Lapid, dejo el ego a un lado. Ahora es tu turno”.

Sa’ar, un exministro y exsocio de Netanyahu, dejó el Likud en diciembre para formar Tikvá Jadashá, con el objetivo de reemplazar a Netanyahu. Poco después de su formación, a Tikvá Jadashá se le pronosticaban hasta 21 escaños, pero el partido fue perdiendo apoyo y terminó con solo 6 escaños tras las elecciones de hace una semana.

Lapid respondió rápidamente a Sa’ar, diciendo que “no hay nada que no esté dispuesto a considerar” para reemplazar a Netanyahu como primer ministro.

“Dije durante la campaña y vuelvo a decir ahora: el país es más importante que mis ambiciones personales o las de cualquier otra persona”, escribió en sus redes sociales.

El líder de Yesh Atid dijo que el enfoque del también considerado “bloque de cambio” durante la próxima semana debería ser garantizar que el presidente Reuven Rivlin no encomiende a Netanyahu la formación de un gobierno después de sus consultas de la próxima semana con representantes de los partidos sobre a quién respaldar para el cargo de primer ministro.

“Para que esto no suceda, todos los partidos del bloque de cambio deben recomendar a Yesh Atid“, dijo. “En el momento en que comience el proceso todo estará sobre la mesa. Estamos preparados para concesiones dolorosas, lo importante es formar un gobierno de cambio y ponernos manos a la obra para curar al país de dos años de crisis social y política”.

Sa’ar respondió diciendo que la propuesta de Lapid debería ser “al revés”.

“El momento de hacerse a un lado es ahora. Después, puede que sea demasiado tarde”, escribió Sa’ar.

El intercambio se produjo cuando el Canal 13 reportó que los representantes de Lapid y Bennett estarían acordando conformar un gobierno de rotación, pero los dos seguirían en desacuerdo sobre quién debería ser primero el primer ministro.

Una clave que ambos compartirían es que si forman un gobierno y Netanyahu deja la política, el otro podría formar una coalición alternativa sin entregar el cargo de primer ministro, según el reporte.

El reporte también dijo que se esperaba que Bennett se reuniera con Lapid y Netanyahu para el final de la semana.

Por su parte, la cadena pública israelí Kan reportó que el partido islamista Ra’am, cuya postura podría ser clave para definir al próximo gobierno, se estaría inclinando por brindar apoyo externo a un gobierno liderado por Netanyahu.

Citando a una fuente importante del partido, el reporte dijo que el partido no respaldaría a una coalición encabezada por Netanyahu si Itamar Ben-Gvir, integrante del partido de extrema derecha Hatzionut Hadatit, se convierte en ministro.

Netanyahu dijo antes de las elecciones que quería que Ben-Gvir cuya inclusión en Hatzionut Hadatit buscó con el fin de no desperdiciar votos de la derecha, fuera parte de su coalición, pero que “no era apto” para ser ministro.

“Esto cambiará si obtenemos mejores ofertas”, dijo la fuente de Ra’am.

El reporte dijo que Ra’am decidirá si recomendará a Netanyahu como primer ministro después de reunirse con el presidente de la Knéset, Yariv Levin, uno de los principales aliados del primer ministro.

Según reportes, Ra’am estaría condicionando su recomendación para primer ministro a que un candidato acepte respaldar un presupuesto para erradicar el crimen organizado en las ciudades árabes israelíes, eliminar la llamada “Ley Kaminitz”, enmendar la llamada Ley del Estado-nación judío, ampliar los poderes de los municipios, otorgar permisos de construcción a las comunidades árabes y aumentar el porcentaje de trabajadores árabes en el sector público.

Este martes el Comité Central Electoral de Israel verificó los resultados de las elecciones y dijo que no se encontró evidencia significativa de fraude electoral. Los resultados se entregarán a Rivlin durante una ceremonia el miércoles.

Rivlin llevará a cabo dos días de consultas con los partidos electos a la Knéset a partir del 5 de abril, el mismo día en que comienza la etapa probatoria en el juicio por presunta corrupción de Netanyahu. Se espera que Rivlin encomiende antes del 7 abril al jefe de partido que más apto considera la tarea para tratar de conformar una coalición de gobierno.

Los resultados finales de las elecciones de la semana pasada no dejaron un camino claro hacia una mayoría para Netanyahu ni sus rivales, la cuarta elección en dos años que termina de manera compleja.

Sin embargo, la perspectiva de una quinta elección ha estimulado la especulación de que, pese a las diferencias políticas o ideológicas, algunos partidos decidan unirse ya sea para darle continuidad al gobierno de Netanyahu o darle fin.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío