Enlace Judío – El artista judío mexicano Yishai Jusidman exhibe por el momento su obra sobre el Holocausto “Azul de Prusia” en el Kibutz Ein Harod, en el norte de Israel.

La exhibición se encuentra por el momento en el Museo de Arte Mishkán de la localidad desde el pasado 24 de marzo, previo a la conmemoración anual de Yom Hashoá el pasado 7 y 8 de abril.

Todas las pinturas de Jusidman de “Azul de Prusia” se basan en fotos de las cámaras de gas, sus puertas, azulejos, tuberías y conductos de ventilación pintados casi en su totalidad en azul monocromático iluminado con toques de tonos de piel, que simbolizan a los judíos que fueron exterminados por los nazis.

El azul de Prusia, como se titula la obra de Jusidman, es un pigmento artificial descubierto en lo que hoy es Alemania en el siglo XVIII que tiene también una liga insólita con el exterminio nazi.

El pesticida usado por los nazis en las cámaras de gas de los campos de exterminio, el Zyklon B, o ácido cianhídrico, tiene un compuesto químico cercano al azul de Prusia, cuyos restos de dicho color quedaron impregnados en dichos oscuros recintos del genocidio.

“El arte sobre el Holocausto es extremadamente problemático”, dijo Jusidman a la agencia AFP, quien visitó Israel para la inauguración de la exhibición. “Hay que tener mucho cuidado y ser muy reflexivo para no caer en clichés cansados o en sentimentalismos o extorsiones emocionales”.

“Siempre pensé que nunca iba a ahondar en esto”, agregó Jusidman quien reconoció haber lidiado en el pasado para lograr expresar en el arte su visión del Holocausto.

Lo que le hizo cambiar de opinión fue ver en 2010 una pintura del pintor belga Luc Tuymans, “Cámara de gas”, de 1986, parte de una retrospectiva en el Museo de Arte Moderno de San Francisco.

“Era una pintura muy pequeña y sin pretensiones, hecha de una manera despreocupada y casual, y no parece que pudiera ser nada”, dijo Jusidman. “Podría ser un almacén o una discoteca y el curador lo explicó como un ejemplo de la imposibilidad de representar el Holocausto”.

Para Jusidman, el punto de vista de Tuyman se convirtió en una oportunidad para embarcarse en su propio examen de cómo representar las cámaras de gas.

“Nadie se ocupó de esto de una manera apropiada, así que pensé, ‘Déjame intentarlo'”, dijo. Tenía casi 50 años en ese momento y sabía que era un desafío que no habría asumido en sus años de juventud.

“Era casi como leer Cabalá”, dijo Jusidman, refiriéndose al adagio de que uno no debería intentar aprender la escuela del pensamiento místico judío hasta que tenga 40 años. “Solo iba a buscar una forma de abordar este tema”.

“Este trabajo no se trata de mí de ninguna manera, no se trata de la experiencia del artista”, dijo Jusidman. “Se trata de una memoria pública”.

Azul de Prusia” se ha presentado diversas sedes desde su primera exhibición en EE. UU. en el año 2013.

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