Enlace Judío México e Israel – La depresión clínica y otros trastornos neurológicos se han convertido en una pandemia casi tan extendida como el coronavirus, y uno de cada seis de la población mundial sufre trastornos neurológicos. Y cientos, si no miles, de compañías tecnológicas y farmacéuticas están compitiendo por una cura para estas enfermedades.

Una empresa israelí, Nextage Therapeutics, ha desarrollado una tecnología que cree que podría refinar el uso de moléculas psicodélicas, también conocidas como alucinógenos, para tratar mejor a personas con trastornos neurológicos.

En las décadas de 1950, 1960 y 1970, se llevaron a cabo miles de estudios de investigación para demostrar los beneficios de los psicodélicos (psilocibina, mescalina, LSD y DMT, por ejemplo) como una herramienta para tratar el trastorno de estrés postraumático (TEPT), la depresión. y otros trastornos psiquiátricos.

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Pero en 1970, cuando el entonces presidente Richard Nixon presentó su Ley de Sustancias Controladas, todas estas drogas se volvieron ilegales. Durante tres décadas, la investigación se detuvo.

Sin embargo, según el fundador y director ejecutivo de Nextage, Abraham Dreazen, ha habido un cambio en la última década. La Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU., por ejemplo, está comenzando a ver la calidad de vida como un factor en la evaluación de medicamentos, lo que abre la puerta a esta innovación médica de acuerdo al reporte de The Jerusalem Post.

La FDA nombró a la terapia con psilocibina, que actualmente se está probando en ensayos clínicos, como una “terapia innovadora”, que debería acelerar el proceso de desarrollo y revisión de fármacos.

La psilocibina está hecha de compuestos químicos obtenidos de hongos alucinógenos.

También otorgó la designación de terapia innovadora a MDMA para el tratamiento del trastorno de estrés postraumático. MDMA es el nombre químico de la droga comúnmente conocida como “éxtasis”.

Israel acaba de unirse a este tipo de esfuerzos.

A principios de este año, Nextage firmó un acuerdo con MindMend, uno de los pioneros en esta nueva ola de desarrollo farmacéutico psicodélico, para utilizar su tecnología de administración patentada “Brain Targeting Liposome System” (BTLS) para optimizar la administración de productos farmacéuticos basados ​​en noribogaína. y finalmente otros derivados de ibogaína.

La ibogaína es una droga extraída de las raíces de una planta que se encuentra en el país costero de África central de Gabón. Los investigadores lo están estudiando para su uso en el tratamiento de la adicción a los opioides.

Pero la droga no está exenta de efectos secundarios. Un comunicado de MindMed explicaba que en la actualidad, “la ibogaína y la noribogaína administradas por vía oral presentan riesgos de seguridad inaceptables debido a sus efectos torsadogénicos a altas concentraciones sistémicas”.

En términos sencillos, explicó Dreazen, la droga puede causar ataques cardíacos. Pero su compañía cree que si es capaz de reducir la dosis administrada mientras mantiene la misma cantidad del fármaco que llega al cerebro en comparación con el resto del cuerpo, incluido el corazón, “ese es el billete de lotería [ganador] . “

El desafío de cualquier fármaco que se utilice para tratar un trastorno neurológico o incluso el cáncer de cerebro es que la barrera hematoencefálica, en su esfuerzo por proteger el cerebro, evita el paso de alrededor del 95% de las moléculas extrañas.

Para solucionarlo, la mayoría de las terapias farmacológicas actuales dirigidas al cerebro y al sistema nervioso central se administran en dosis extremadamente altas para que lleguen las cantidades suficientes a donde se necesita. La desventaja es que todo lo que no atraviesa la barrera se dispersa sistémicamente por todo el cuerpo, lo que a menudo causa efectos secundarios graves.

La plataforma BTLS, licenciada por el Technion-Israel Institute of Technology hace cuatro años y desarrollada internamente desde entonces, utiliza un vehículo liposomal con un complejo de focalización único que permite la penetración de la barrera hematoencefálica y la administración específica del cerebro de todo tipo de agentes.

El uso de liposomas en la administración de fármacos no es nada nuevo, admitió Dreazen. El concepto es bien conocido en farmacología. De hecho, tanto las vacunas Pfizer como Moderna COVID-19 se administran a nuestro cuerpo usando estas cápsulas de ácidos grasos.

Pero Nextage ha adjuntado una “flecha pequeña” de siete péptidos de aminoácidos, esencialmente una proteína muy pequeña, que es parte de una proteína mucho más grande que es nativa del cerebro y tiene una forma de transportar activamente la cápsula liposomal a través de la barrera hematoencefálico.

Una vez que la cápsula se introduce en el cerebro con la flecha, se aloja allí y comienza a disolverse, lo que facilita la liberación del material activo: el fármaco.

Esto permite a las empresas farmacéuticas reducir sustancialmente la dosis necesaria y, por tanto, los efectos secundarios. “Es realmente un atisbo de esperanza en el mundo farmacéutico”, dijo Dreazen.

La empresa ya ha realizado una gran cantidad de trabajos preclínicos que demuestran la eficacia y universalidad de su tecnología.

Hace aproximadamente un mes, terminó un primer estudio de toxicidad de seguridad con cannabidiol y ahora se encuentra en el proceso de planificación de un ensayo clínico de Fase I / II para la administración y el uso de CBD para ciertas afecciones.

Nextage, con sede en Ness Ziona, es parte de un grupo que ha estado en el negocio de la entrega de medicamentos durante 14 años. Su empresa filial, IMIO, se centra en los psicodélicos. La compañía completó una ronda de financiación de 2 millones de dólares hace un par de meses.

Otro compuesto que la compañía espera analizar es la dietilamida del ácido lisérgico, también conocida como LSD. Dreazen dijo que el LSD “es una droga realmente prometedora”. Su desafío es que cuando se toman, las personas pueden “viajar” de 15 a 17 horas, lo que lo hace muy inviable como tratamiento crónico.

Pero al igual que con la ibogaína, cree que si se puede reducir la dosis y la menor cantidad posible ingresa al cuerpo en lugar de al cerebro, “potencialmente podría obtener el mismo efecto terapéutico sin la longevidad del viaje”.

“En los EE. UU., el movimiento psicodélico se ha disparado en los últimos 12 meses”, dijo Dreazen.

“Creo que los psicodélicos en Israel están emergiendo, y somos la primera empresa pública que realmente pone nuestros dientes en ello. Israel siempre ha estado a la vanguardia de la investigación y el desarrollo y estamos comprometidos a encabezar esta industria. Israel siempre ha estado a la vanguardia de la investigación y el desarrollo y estamos comprometidos a encabezar esta industria”, concluyó.

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