Enlace Judío – El primer ministro israelí Naftali Bennett se reunió este jueves con altos funcionarios del Ministerio de Salud de Israel después de que surgiera una disputa pública esta semana sobre el enfoque del gobierno sobre el COVID-19, informó The Times of Israel.

A la reunión asistieron el ministro de Salud, Nitzan Horowitz, el director general del Ministerio de Salud, Najman Ash, la jefa de los servicios de salud pública, Sharon Alroy-Preis, y el comisionado del gobierno para COVID-19, Salman Zarka.

Según una declaración conjunta de la Oficina del Primer Ministro y el Ministerio de Salud, la reunión trató las “prioridades de trabajo conjunto” y “varios temas” antes de que se convoque el domingo al gabinete de coronavirus encargado de dirigir la política contra la pandemia.

“El primer ministro y el ministro de Salud enfatizaron durante la conversación que le dan gran importancia a la posición de los funcionarios profesionales, incluso cuando difiere de la posición de los políticos”, dijo la Oficina del Primer Ministro y el Ministerio de Salud.

El comunicado afirmó que “no hubo desacuerdo” entre las dos partes y que Bennett “dejó en claro a los participantes que la estrecha cooperación que ha caracterizado la lucha contra el coronavirus hasta ahora continuará”.

La reunión pareció marcar el fin de la disputa entre Bennett y los funcionarios de salud, quienes enfurecieron después de que el primer ministro hiciera públicas sus diferencias durante su viaje a EE. UU. esta semana.

En una sesión informativa con periodistas israelíes en Nueva York, Bennett acusó a los expertos médicos de asesorar al gobierno de “no ver el panorama completo” y enfatizó que ellos no toman las decisiones finales, sino el gobierno.

Horowitz calificó los comentarios de “innecesarios y desafortunados”, mientras que Ash dijo que las palabras fueron inesperadas y “desagradables”.

El intercambio se produjo antes de la reunión del domingo del gabinete del coronavirus, la primera en un mes, y se espera que Bennett se resista a imponer nuevas restricciones por coronavirus a pesar de cientos de nuevas muertes por COVID-19.

Si bien la cuarta ola de COVID-19 de Israel ha registrado un número récord de casos diarios, el número de pacientes que necesitan hospitalización se ha mantenido más bajo que los episodios anteriores, lo que los expertos atribuyen a las altas tasas de vacunación del país.

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