Enlace Judío México e Israel- El jueves 28 de octubre se inauguró la exposición de pintura de Josele T Cesarman, en la Galería Torre del Reloj, en el Parque Lincoln de Polanco.

Más de cien asistentes se asombraron con la exhibición llamada Nueva York en el reloj, impresionados por la técnica con la cual Josele T. Cesarman plasmó la energía y belleza de esta icónica ciudad.

Para abrir el evento Tamara Trottner, hija de la artista, dijo:

“Amante del arte desde muy joven, Josele T Cesarman hizo la maestría y el doctorado en historia del arte y un día decidió convertir la teoría en expresión propia para plasmar las emociones que las pinturas provocaban en ella. Fue así como, en 1981, tuvo su primera exposición.

Desde entonces ha tenido decenas de exhibiciones en México y en el extranjero, en lugares tan importantes como el Museo del Palacio de Bellas Artes, la Lotería Nacional, el Nicolás Roerich Museum de Nueva York, entre muchos más.

De la artista han hablado escritores, poetas y pintores extraordinarios: Carlos Fuentes, Ángeles Mastretta, Carlos Monsivais, Octavio Paz, Rufino Tamayo, Mathias Goeritz… en las palabras de cada uno se refleja el asombro que generan los cuadros de Josele en los que, además de una técnica trabajada por décadas con grandes maestros, se trasluce su esencia.

Josele T. Cesarman es, sin lugar a duda, una artista extraordinaria y valiente. Al ver su trayectoria nos encontramos cada vez con técnicas nuevas, temas diferentes; tanto crea un paisaje de sutiles árboles, como un collage del can can en el París de 1800, de igual forma se entusiasma con flores que explotan con colores magníficos, como con el bullicio de estructuras de metal que conviven en un caos perfectamente ordenado.

Lo que permanece es la sensación, dice Josele en una entrevista, en sus lienzos lo que queda plasmado son sus recuerdos, sus viajes, largas caminatas, espejismos y sueños que dejan una huella indeleble.

Hay seres que vienen a este mundo a llenar con su luz los caminos, las dudas, las sombras, Josele T. Cesarman es así, su presencia lo inunda todo, lo torna alegre, lo ilumina. Algún día, para regocijo de todos, decidió tomar un pincel y éste se volvió extensión de su magia. Los lienzos hablan, a veces cantan, cuentan historias, abrazan.

La mirada de Josele T Cesarman transforma paisajes, el color se torna nube y luna y las nubes destellos y crecen sobre la tela montañas, lagos y edificios que, como Nueva York, se vuelven una fiesta de infinitas posibilidades”.

La exposición permanecerá abierta hasta el 7 de noviembre.


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