Enlace Judío – La tercera dosis de la vacuna contra COVID-19 de Pfizer sería efectiva entre 9 a 10 meses y tal vez incluso más, según datos preliminares de una investigación israelí.
El Canal 12 israelí reportó que los resultados preliminares de un estudio sobre los niveles de anticuerpos que está llevando a cabo el Hospital Tel Hashomer se harán públicos en 2 a 4 semanas, y mostrarán que la tercera dosis ofrece una protección diferente, aparentemente mejorada, de las 2 primeras dosis, recogió The Times of Israel.
La vacuna de refuerzo produciría más anticuerpos, y los anticuerpos también son mejores para prevenir la enfermedad, de acuerdo con la cadena, que cita a personas involucradas en el estudio.
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Al analizar los niveles de anticuerpos, los investigadores han concluido que la tercera dosis podría ser efectiva durante 9 a 10 meses, o incluso más, predijeron los investigadores.
No se dieron a conocer detalles sobre el alcance o la metodología del estudio Tel Hashomer.
Israel comenzó su campaña de refuerzo masiva en agosto después de descubrir que la protección ofrecida por su campaña inicial de vacunas de 2 dosis comenzó a desaparecer después de unos 5 meses.
La última investigación sigue a un estudio israelí a gran escala publicado el mes pasado que mostró que una tercera dosis de refuerzo fue 92% efectiva para prevenir enfermedades graves en comparación con aquellos que recibieron solo 2 dosis de la vacuna de Pfizer.
El estudio realizado por el servicio de salud Clalit, el más grande de Israel, con fondos de la Facultad de Medicina de Harvard, se publicó en la revista médica Lancet sobre la base de un estudio de 728,321 personas que recibieron la tercera dosis en comparación con un grupo de control de un número similar que recibió solo 2 dosis al menos 5 meses antes.
Según el informe, la tercera dosis del 93% fue efectiva para prevenir el ingreso al hospital, y el servicio de salud registró 231 casos de hospitalización para el grupo de 2 dosis, en comparación con 29 para los que recibieron el refuerzo.
De manera similar, la tasa fue del 92% para la enfermedad grave con 157 casos en el grupo de control en comparación con 17 entre los de la categoría de la tercera inyección.
El estudio también encontró que la vacuna de refuerzo fue 81% efectiva en la prevención de muertes relacionadas con COVID, con solo 7 registradas entre quienes recibieron la vacuna de refuerzo en comparación con 44 muertes para quienes no la recibieron.
El período de estudio fue del 30 de julio de 2020 al 23 de septiembre de 202 y los participantes tenían una edad promedio de 51 años. Israel ha utilizado casi exclusivamente la vacuna de Pfizer.
Ambos grupos informaron un número significativamente menor de hospitalizaciones y muertes que aquellos que no fueron vacunados en absoluto.
“Los resultados demuestran de una manera muy convincente que la tercera dosis de la vacuna es extremadamente eficiente”, dijo Ran Balicer, director de innovación de Clalit.
Israel fue el primer país en adoptar ampliamente la tercera dosis y el final de la cuarta ola de Israel se ha atribuido al menos en parte a su campaña de vacunación de refuerzo, que comenzó entre los mayores de 65 años en agosto y se extendió rápidamente al resto de la población.
Hasta el domingo, casi 4 millones de israelíes, más del 42% de la población total, han recibido una tercera dosis de la vacuna COVID. Cerca del 67% de la población total ha recibido al menos una vacuna.
Alrededor de 650,000 personas que son elegibles para vacunas no han recibido ninguna de las inyecciones, mientras que alrededor de 1.1 millones de israelíes elegibles para el refuerzo aún no lo han recibido.
Desde entonces, EE. UU. y otros países han seguido su ejemplo, aunque algunos han aprobado el refuerzo solo para personas mayores o para personas con afecciones preexistentes.
El número de casos activos de COVID-19 en Israel, según su Ministerio de Salud, se han reducido a 6,155 después de estar por encima de los 10,000 durante más de 3 meses y después de superar los 90,000 a principios de septiembre.
Los pacientes graves por el momento son 164, de los que 106 están intubados a ventilación mecánica y 39 a un sistema ECMO. La cifra de muertes por COVID-19 ha llegado a 8,123.
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