Enlace Judío.- El Ministerio de Salud ha estado liderando un proyecto para identificar COVID-19 de las aguas residuales, utilizando tecnología desarrollada por la empresa de tecnología israelí Kando, informó The Jerusalem Post
La tecnología de Kando se utiliza para identificar COVID-19 utilizando sensores y unidades de control colocadas en los sistemas de alcantarillado municipales para recopilar datos, así como análisis de inteligencia artificial y computadora.
Desde que comenzó la pandemia, utilizando tecnología en áreas de aguas residuales, el Ministerio de Salud ha iniciado proyectos en varias ciudades de Israel como un medio para encontrar una solución para identificar el nuevo coronavirus. Investigadores de la Universidad Ben-Gurion y el Technion también ayudaron con la iniciativa.
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El Ministerio de Salud está utilizando la tecnología de Kando y desplegará cientos de unidades de control en todo Israel.
Todo esto podría prevenir una ola futura de aumento de la morbilidad y permitir el descubrimiento temprano de nuevas variantes mediante la identificación geográfica.
La iniciativa incluye el seguimiento quincenal de localidades con una población de más de 20.000 personas. Esto permitiría la recolección de muestras que podrían usarse para detectar la presencia del virus en las aguas residuales.
Los laboratorios de la Universidad Ben-Gurion recolectan estas muestras y realizan pruebas PCR adecuadas para aguas residuales. Si hay algún resultado positivo, se realiza otra prueba para determinar dentro del día siguiente si esto indica o no la presencia de la variante Ómicron.
Ya en 2020, un destacado experto israelí en contaminantes en el agua pidió que se lleve a cabo una investigación urgente sobre la capacidad del nuevo coronavirus en las heces humanas para sobrevivir en arroyos, aguas subterráneas, instalaciones de tratamiento de aguas marinas y residuales y en playas.
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