Enlace Judío.- Una veterana periodista palestina ha muerto a tiros durante una redada de fuerzas israelíes con duros enfrentamientos entre la policía y violentos palestinos en la ciudad cisjordana de Jenin el miércoles por la mañana, dijo el Ministerio de Salud de la Autoridad Palestina, según The Times of Israel.

La corresponsal de Al-Jazeera, Shirin Abu Aqleh, de 51 años, recibió un disparo en la cabeza mientras cubría la operación del ejército israelí en la ciudad, que ha experimentado altas tensiones en los últimos días. En las imágenes de la escena tras recibir el disparo, se puede ver a Abu Aqleh con un chaleco de prensa y un casco.

Los funcionarios de salud palestinos también informaron que el periodista Ali Samudi, que trabaja para el periódico Al-Quds, recibió un disparo en la espalda, aunque su condición se consideró estable.

Según el ejército israelí, las tropas entraron en el campamento de refugiados de Jenin y en la ciudad cercana de Burqin para arrestar a sospechosos de terrorismo. La ciudad y sus alrededores han sido escenario de repetidos enfrentamientos armados entre soldados israelíes y palestinos en los últimos meses.

“Durante la operación en el campo de refugiados de Jenin, los sospechosos dispararon una enorme cantidad de disparos contra las tropas y arrojaron artefactos explosivos. Las fuerzas [israelíes] respondieron al fuego. Se identificaron impactos”, dijo el ejército israelí en un comunicado.

El ejército dijo que estaba “investigando la posibilidad de que los periodistas resultaran heridos, posiblemente por disparos de palestinos”.

Shirin Abu Aqleh, periodista palestina que trabajaba para Al-Jazeera, en una entrevista con el canal arabe MBC (Captura de pantalla: YouTube)

“Pero aunque le hayan disparado los soldados, o Dios no lo quiera, hirieron a alguien que no estaba involucrado, esto sucedió en la batalla, durante un tiroteo, donde esta palestina está con los tiradores. Entonces esto puede suceder”, dijo el portavoz militar israelí Ran Kochav a la Radio del Ejército.

Kochav describió a Abu Aqleh como “filmando y trabajando para un medio de comunicación en medio de palestinos armados. Están armados con cámaras, si me permite decirlo.

Un funcionario de salud palestino descartó la posibilidad de que Abu Aqleh muriera por disparos palestinos errantes.

“La evaluación es que murió por disparos israelíes, y los testigos en el lugar también lo atestiguan”, dijo el funcionario en una llamada telefónica.

El ministro de Relaciones Exteriores, Yair Lapid, dijo que Israel había ofrecido a los palestinos una investigación patológica conjunta sobre “la triste muerte de la periodista Shireen Abu Aqla”.

“Los periodistas deben estar protegidos en zonas de conflicto y todos tenemos la responsabilidad de llegar a la verdad”, dijo en un comunicado.

En la gran mayoría de los casos, las muertes de palestinos a manos de soldados son investigadas por el ejército. Los grupos de derechos humanos han criticado el sistema de justicia militar israelí, que rara vez acusa a los soldados por las muertes de palestinos a tiros.

Abu Akleh, de 51 años, nació en Jerusalén. Comenzó a trabajar para Al-Jazeera en 1997 e informaba regularmente frente a la cámara desde todos los territorios. Su posición la convirtió en un rostro familiar para decenas de millones de espectadores.

Shireen Abu Aqleh, un ser humano maravilloso, una periodista destacada, una querida amiga desde hace mucho tiempo, fue asesinada a tiros por el ejército de ocupación israelí. El corazón se rompe. Palestina sufre. Descanse en paz, fuerza y amor”, escribió en Twitter Hanan Ashrawi, ex alta política palestina.

Colegas y amigos lloraban a Abu Aqleh como una valiente periodista que cubrió a Israel y los palestinos durante décadas.

“Nunca imaginé que estaría leyendo titulares sobre la muerte de Shireen. Cubrió ambas Intifadas; para mí, ella era invencible, eterna, una persona hermosa que nos sobrevivirá a todos nosotros”, tuiteó la periodista palestina Dalia Hatuqa.

Al-Jazeera acusó a los soldados israelíes de “apuntar y matar deliberadamente” a Abu Aqleh “a sangre fría”.

“Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que condene y responsabilice a las fuerzas de ocupación israelíes”, dijo la emisora que tiene su sede en Catar.

Soldados israelies realizan una redada en una casa en la ciudad de Rummanah, cerca de la ciudad de Jenin, en Cisjordania, el 8 de mayo de 2022, en la casa de un terrorista palestino acusado de llevar a cabo un ataque fatal con hacha en el centro de la ciudad de Elad dos dias antes. (JAAFAR ASHTIYEH / AFP)

Los israelíes critican el sesgo pro-palestino de Al-Jazeera, pero el gobierno ha permitido en gran medida que sus corresponsales trabajen sin obstáculos.

Los periodistas palestinos denuncian regularmente que las fuerzas israelíes los atacan durante los enfrentamientos entre las fuerzas israelíes en Cisjordania y Jerusalén Este.

En junio pasado, la policía israelí detuvo a la corresponsal de Al-Jazeera Givara Budeiri mientras cubría una protesta en Sheikh Jarrah, lo que generó controversia. La mano de Budeiri también se rompió durante el incidente, según Al-Jazeera.

Y en febrero, el corresponsal de Agence-France-Presse, Jaafar Ishtayeh, recibió un disparo de la policía fronteriza con una bala de goma mientras cubría protestas violentas en Beita, cerca de Naplusa, según la Asociación de Prensa Extranjera.

El grupo terrorista Hamas condenó la muerte de Abu Aqleh como un “asesinato deliberado”.

Las tensiones han sacudido Cisjordania en las últimas semanas. Los terroristas palestinos, muchos del área de Jenin, han cruzado la valla hacia Israel para cometer ataques terroristas, parte de una ola de terror sangriento que ha dejado 19 muertos desde finales de marzo.

Las fuerzas israelíes han respondido tomando medidas enérgicas en Jenín, intensificando las redadas y las detenciones en un intento por restablecer el orden. Las operaciones de seguridad a menudo dieron lugar a enfrentamientos armados con los palestinos locales.

Según el Ministerio de Salud de la Autoridad Palestina, las tropas israelíes han eliminado a 30 palestinos desde finales de marzo. Algunos cometieron violentos ataques terroristas, mientras que otros participaron en enfrentamientos con soldados. Otros, como una mujer palestina casi ciega cerca de Belén, parecían ser transeúntes desarmados.

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