Enlace Judío- Anat Perl, la artista israelí del arte milenario Metzutzot, habla sobre su proyecto “Blessing Stones”, con el cual busca trasmitir la esencia del judaísmo e Israel, a través de la mezuzá.
DIEGO SCIRETTA
De sonrisa clara y mirada franca, Anat Perl nos recibe en su casa, una artista israelí que se dedica al milenario arte de Metzutzot, cuyas piezas exclusivas hoy se lucen en galerías y casas de judíos y no judíos de todo el mundo.
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Su proyecto, que inició en 2014, se llama “Blessing Stones” (Piedras de la bendición), una propuesta que combina arte con uno de los símbolos judíos por excelencia (la mezuzá). Anat trabaja con materiales que están mencionados en la Torá, en la historia y que son el ADN del pueblo judío y la tierra prometida.
Con un mensaje milenario y de energía, “cada piedra es un proceso de formación de millones de años; son testigos y fueron parte de las batallas y construcción del Israel que hoy respiramos”, dijo Anat. “Esas piedras, sumadas a otros materiales como oro, plata, hierro (totalmente trabajados a manos), son un pedacito de Israel que yo le entrego al mundo para que lo tengan en su casa y se las den a las familias”.
Asimismo, indicó que “esa energía y protección que sentimos al tocar y acariciar las piedras del muro de los lamentos”, es lo que causan las piedras. “La verdad es que soy feliz de tener el privilegio de enviar un pedacito de Israel y su energía a cientos de hogares, no solo Judíos, sino también cristianos y de otras religiones”, confesó Anat.
Matices de la sociedad israelí
El arte de Anat es único. Ver las obras terminadas dan calidez y realmente transmiten una energía muy especial. A quienes les gusta jugar con las metáforas, se puede observar en su trabajo una síntesis de Israel.
La piedra como la base de nuestra sociedad, la piedra Jerusalén, que hace a la dureza de nuestra tierra prometida y los materiales como oro, hierro, plata, cobre, rodio y vidrio soplado que podrían representar los distintos matices de la sociedad israelí.
Anat explicó que su elección de materiales es una combinación única y rara de componentes que normalmente no se ven juntos. Como, por ejemplo, la piedra en bruto combinada con plata pura u hormigón mezclado con oro puro. Su elección de usar estos materiales contrastantes, más allá del aspecto artístico, transmite un mensaje especial: ¡que todos somos uno, independientemente de las diferencias y juntos somos mucho mejores!
Anat no solo usa los materiales bíblicos, sino que trabaja con las mismas herramientas que hace 2 mil años trabajaban los viejos vendedores de Metzutzot, en las antiguas ferias de las aldeas Israelitas.
Enlace Judío (EJ): ¿Cuáles son tus proyectos?
Anat Perl (AP): Queremos llevar y acercar nuestro arte a México, Panamá y EE.UU., donde pensamos llevar adelante exposiciones y ventas. Estamos en la faceta inicial de este proyecto, en busca de patrocinadores y organizaciones que nos ayuden hacerlo posible.
Por supuesto, tenemos nuestro sitio en las redes sociales, pero no es lo mismo verlo en en persona que por la computadora, porque mi arte transmite energía y eso se siente.
Las obras más importantes
Entretanto, habló sobre las obras más importantes que ha vendido y el trabajo que requiere la realización de cada una de las mezuzot.
EJ: ¿Cual fue la obra mas importante que vendiste respecto a su significado afectivo y por el precio?
AP: La mezuzá que diseñé para el Museo Uri Geller en Jaffa es, sin duda, el trabajo más importante en cuanto al tamaño, el diseño, el trabajo y el dinero invertido en la obra hasta ahora. El objetivo era diseñar una mezuzá que reflejara a Uri. La obra fue tallada en una roca enorme (que pesa mas o menos 25 kilos) y cincelada por mi socio Boaz, en forma de un mapa de la Tierra de Israel con una cuchara doblada que diseñé en la piedra (la marca registrada de Uri).
Elegí iluminar la mezuzá y así es como se refleja el pergamino dentro del tubo de vidrio en el centro de la mezuzá, que se crea mediante una técnica especial de soplado de vidrio. La vista resultante es espectacular.
La pieza más emocionante que vendí fue a un joven inmigrante de los Países Bajos, cuya abuela le pidió que le buscara un artículo que reflejara el judaísmo y a Israel. Resulta que la abuela pasó por el Holocausto y pidió un artículo que perpetuara el judaísmo por generaciones para su familia.
El chico vino a mi casa y, en llamada telefónica con su familia en los Países Bajos, eligió el artículo más apropiado, una hermosa mezuzá con una estrella de David en una combinación de oro y plata sobre la piedra de Jerusalén. La abuela también recibió un certificado de autenticidad con una dedicatoria personal y quedó muy conmovida por el gesto. La historia fue publicada en un importante diario de Holanda.
EJ: ¿Desde qué época existen las Metzutzot y cuál es su función?
AP: En Pesaj, en la festividad judía más antigua se dio el mandamiento de la mezuzá: “Y escribiste en las mezuzá de tu casa y en tus puertas”. La mezuzá es un recordatorio diario y una declaración pública de la fe y la identidad judía.
La principal importancia de la mezuzá es que inspira la santidad del Creador en el hogar judío. Cuando la casa se entrega al Creador, por supuesto, él lo guarda y la protege y a quienes viven en ella. De ahí la virtud de la mezuzá, de proteger a los miembros del hogar incluso cuando salen de él. La mezuzá está destinada a recordarnos la realidad de Di-s en todo momento. La mezuzá da protección a la casa donde se fija.
El arte de la mezuzá
El proyecto “Blessing Stones” comenzó en 2014 y está diseñado para brindar belleza a cada entrada de la casa y cada marco de puerta; además, otorga una apariencia lujosa y una presencia impresionante y poderosa con un diseño único e inusual en su tipo.
EJ: Tus obras no son baratas, ¿puedes explicarnos por qué vendes tanto, cual es el secreto?
AP: La mezuzá de “Blessing Stones” es una declaración de estilo, belleza, originalidad y gusto artístico único de los propietarios. Más allá de eso, está la conexión directa de cada judío con la Tierra Prometida; une en ella la historia y el misterio y servirá por muchas generaciones.
Cada mezuzá es una obra de arte única que viene con un certificado de autenticidad firmado. El diseño es único en su género que combina contrastes tanto en líneas como en materiales. Se invierte mucho pensamiento y muchas horas de trabajo en cada artículo. ¡Cada mezuzá tarda más de 27! —exclamó.
Los procesos empiezan desde la piedra en bruto hasta la obra acabada. Cada artículo está hecho a mano con atención a los detalles más pequeños. Los materiales que elijo para trabajar combinan piedra de Jerusalén, hormigón, oro, plata, hierro, rodio y vidrio. Materiales que no se suelen ver juntos.
El precio de la mezuzá encarna dentro de ella el diseño único, la gran inversión realizada, hasta el trabajo terminado; además, incluyen los costosos materiales con los que se fabrican.
Los artículos son lujosos y con un nivel de acabado muy alto. También creé un soporte especial en el que se puede poner la mezuzá en una mesa o vitrina como una estatua; lo cual tiene un significado especial para aquellos que eligen no usar la mezuzá en su función tradicional.
Diego Sciretta
Enlace Judio desde Shomrom Israel
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