Enlace Judío México e Israel – Las confrontaciones comenzaron con bombas molotov, autos en fuego y un claro ataque de parte de los terroristas palestinos hacia las defensas israelíes quienes se encontraban en Jenin como parte de una operación militar. 17 años solamente, Amjad al Fayed era su nombre, miembro del brazo armado del Yihad Islámico Palestino y Hamás. Según medios palestinos él fue “Otro adolescente palestino muerto por disparos de la policía israelí en Cisjordania ocupada “.

El monstruo (Israel) es detalladamente definido, sin matices ni segundas lecturas. La fotografía recortada del chico palestino esconde no solo su arma, sino un sistema de educación en el odio y la muerte. La inocencia no es más que una puesta en escena con fines propagandísticos.

A los medios palestinos se les olvidó agregar un detalle, Amjad al Fayed no era inocente. Fue uno de los jóvenes sospechosos que lanzaron dispositivos explosivos hacia los soldados israelíes, quienes respondieron en defensa a los ataques, dando evidencia de que la edad del terrorista no lo absuelve de su culpabilidad. El doble standard no acaba aquí, ya que no es normal que se cuestione la edad de un atacante en Cisjordania, pero que no se piense dos veces en otros países, como España, Francia o Chile.

La realidad se impone, y 19 israelíes muertos a manos de terroristas palestinos son razón más que suficiente para que el pueblo demande al gobierno israelí, seguridad y protección. Y la única forma de asegurarla es desarmar las células terroristas en Cisjordania.

El caso de Amjad no es el primero, sino uno más en la lista de reclutamiento infantil por parte de grupos terroristas. Esto si bien, es inaceptable en nuestra conciencia occidental, es cada vez más aceptado (o ignorado) por las masas, (sólo) si se puede culpar a Israel.

¨Un mártir¨, ¨héroe¨, ¨un ejemplo a seguir¨ fueron algunos de los comentarios dirigidos al joven palestino que lastimosamente fue una víctima más del adoctrinamiento radical de estos grupos, que ponen sus ideologías sangrientas por encima de la paz, la convivencia y el futuro. La realidad es una puesta en escena.

Adi Rosenstock Gutreiman, Hanoar Hatzioní, Costa Rica
Ashley Jocelyn-Holt Eidelstein, Tzeirei Amí, Chile
David Lukowiecki Reichberg, Hanoar Hatzioní, Costa Rica
Sebastián Reifer Solano, Hanoar Hatzioní, Costa Rica
Daniel Cordero Rubinstein, Hanoar Hatzioní, Costa Rica
Janijim Majon leMadrijei Jul, Jerusalén

Los autores de esta columna son participantes del Majon Lemadrijei Jul en Jerusalén (Instituto de Liderazgo para jóvenes judíos de la diáspora). Asistiendo al curso de “Herramientas para combatir el BDS y el antisemitismo”, logran administrar sus capacidades para generar estos contenidos de forma independiente.


 

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