Enlace Judío México e Israel – La cantante y actriz Imperio Argentina contó que durante su estancia en Berlín, el Führer le solicitó que fuera con él a su refugio de la montaña: “Hitler quiso ser mi amante”, confesó años después en varias entrevistas y nunca ocultó su admiración por el líder nazi. “Lo he dicho muchas veces, aunque no se lo quieran creer: Adolf Hitler era un hombre muy atractivo”.
Tampoco escondió su simpatía con los falangistas y con el dictador Francisco Franco.
Al final de la Segunda Guerra su relación con los nazis provocó que se boicotearan sus presentaciones y películas. Cuando se presentó en el Carnegie Hall de Nueva York, afuera del recinto hubo protestas con carteles: “No pasen. Aquí actúa la querida de Hitler”.
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En esa época Imperio Argentina también intentó ingresar a México para actuar en el cine. Su presencia fue rechazada por los actores mexicanos encabezados por Jorge Negrete, en su papel de secretario de la Asociación Nacional de Actores (ANDA).
Exigió a las autoridades de la Secretaría de Relaciones Exteriores que se le negara la entrada a México. Advirtió que los actores mexicanos no trabajarían con “Imperio Argentina”. La recordaron que la actriz era una simpatizante de los nazis y también de los falangistas españoles.
Escape de nazis a México
Transcurrían los primeros meses del final de la atroz Segunda Guerra Mundial y en esos días la Secretaría de Gobernación advertía a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) sobre la entrada a México de “turistas” que en realidad buscaban refugio político en el país, debido a que eran buscados en Europa para juzgarlos por “crímenes de guerra”.
En el continente europeo la situación política hervía por los juicios de Nuremberg que pretendían condenar a los altos jerarcas nazis por crímenes de lesa humanidad. Habían comenzado desde finales de 1945. Destacaba el proceso contra el Mariscal Hermann Göring, quien siempre mostraba una actitud soberbia y altanera ante fiscales y jueces.
No obstante, para mediados de 1946 la prioridad de perseguir a criminales de guerra nazis cedía ante los conflictos militares que no cesaban: José Stalin invadió Manchuria e Irán y sus tropas imponían a la fuerza gobiernos comunistas en Europa del Este. Debido a ello resurge la amenaza de un nuevo conflicto, ahora entre Estados Unidos y la Unión Soviética.
En ese envenenado ambiente Winston Churchill proponía, en secreto, que el presidente Truman utilizara la nueva bomba atómica contra Moscú para someter a Stalin.
La amenaza de que los jinetes del apocalipsis volviesen a cabalgar benefició a los ejecutores de “la solución final al problema judío”, como a los miembros de las SS y a los verdugos que asesinaron a miles de hebreos en naciones del suelo Soviético y Europa del Este.
Esos verdugos, como si fueran ratas, intentaban abandonar desesperadamente la nave europea a cualquier precio.
Varios de esos “turistas” ya habían huido a la República Mexicana. Lograron entrar de manera ilegal con documentos falsos. Muchos más intentaban por diversos medios escapar, como fuese, a Latinoamérica.
Además, oficiales de alto rango y soldados de las Wehrmacht presos en campamentos aliados pretenden rescatar su nacionalidad mexicana para regresar a México. Eran hijos de empresarios y ciudadanos alemanes que habían nacido en Chiapas, Veracruz, Ciudad de México, etcétera. En los albores de la Segunda Guerra Mundial rechazaron la ciudadanía mexicana y viajaron a Alemania para enrolarse en el ejército de Hitler.
Los trámites para recuperar su antigua nacionalidad los realizaron en el consulado de México en Frankfurt, muchos lo lograron (1).
Boicot a Imperio Argentina
Magdalena Nile del Río, cantante y actriz nacida en Buenos Aires en 1906, realizó su carrera principalmente en España donde fue bautizada con el sobrenombre de Imperio Argentina. Fue hija de dos destacados artistas. Su madre, Rosario del Río, actriz y su padre Antonio Neli, guitarrista.
En Buenos Aires, Imperio inició su carrera a los 7 años bailando tablado. Su debut en el cine sucedió en el año 1927, cuando las películas aún eran mudas, en “Hermana San Sulpicio”, dirigida por el director Florián Rey, con quien se casó.
Para el siguiente año viajó a Alemania para filmar la película “Corazones sin rumbo”.
Tras la caída del gobierno republicano en España, Imperio y su esposo se afiliaron a las Falanges creadas por el fascista José Antonio Primo de Rivera y se hicieron simpatizantes del dictador Francisco Franco.
“Fue precisamente Goebbels quien, en plena guerra civil española, le invitó a rodar en los mejores estudios europeos de la época, los de la UFA, para satisfacer los deseos de Hitler, quien confesaba haber visto veinticuatro veces Nobleza baturra, uno de sus grandes éxitos”, de Imperio, según el Diario Clarín.
Los esposos viajaron a Berlín para incorporarse a la industria del cine alemán, cuyos estudios UFA, los más grandes del continente, filmaban principalmente películas propagandísticas a favor de los nazis.
En los estudios de Goebbels, Imperio filmó al menos cuatro películas, una versión de la ópera de Carmen, “Carmen la de Triana” en 1938, además de una versión en alemán, “Andalusische Nächte” (noches andaluzas). Otra fue “La canción de Aixa”, en 1939.
Estando en Berlín, en marzo de 1939, recibió una tarjeta de invitación personal para una recepción que lleva el membrete del Adolfo Hitler, membretada con la esvástica.
“Un día me llamó Goebbels: ‘El Führer quiere ver a la señora’. Llegan al restaurante unos policías con la orden de llevarme al Reichstag. Fui a ver a Hitler. El Führer había visto dos veces Nobleza baturra y me recibió muy admirativo. ‘Meine künstlerin. Ich liebe dich’ (‘Mi artista. Me encantas’)”, según Clarín.
“Hitler había sido periodista, era un dibujante bueno y sobre todo un romántico. Conmigo, ya te digo, estuvo amabilísimo”.
Imperio Argentina contó que el Führer le solicitó que fuera su “novia”. Para ello le solicitó que la acompañara a su refugio de la Montaña. “Hitler quiso ser mi amante”. Imperio dijo que se negó, algo poco probable considerando el inmenso poder de Hitler en la Alemania nazi.
Nunca ocultó su admiración por el Führer: “Lo he dicho muchas veces, aunque no se lo quieran creer: Adolf Hitler era un hombre muy atractivo”. Tampoco ocultó su simpatía con los falangistas y con el dictador Francisco Franco, quien correspondía contando su admiración por la diva.
Al término de la Segunda Guerra, cuando preparaba una gira por México, Jorge Negrete, secretario general de la ANDA, solicitó el 18 de marzo de 1946 al Secretario de Relaciones Exteriores (SRE), el General Francisco Castillo Najera, le negase la entrada a Imperio Argentina al país.
“En nombre de la Sección de Actores del Sindicato de Trabajadores de la Producción y por acuerdo de este Ejecutivo, nos dirigimos a usted de la manera más atenta para suplicarle que dado el caso de que la Sra. Imperio Argentina pida su entrada a la República Mexicana, le sea negada por esa secretaría a su digno cargo, pues es de sobra conocida por usted la labor franquista y fascista que ha desarrollado, tanto en Europa como en América”, señala el oficio firmado por Jorge Negrete.
Agrega que los actores mexicanos, “por ningún motivo, ni en ningún momento”, trabajarán al lado del Imperio Argentina, porque personajes como ella han servido de instrumento para “perjudicar a la familia artística universal”.
Con esa petición Jorge Negrete se sumó al nutrido grupo de artistas que al término de la Segunda Guerra Mundial se organizaron para rechazar la ideología y políticas de los nazis.
(1) https://www.proceso.com.mx/reportajes/2013/5/1/mexicanos-que-pelearon-por-hitler-117714.html
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