Enlace Judío – Anticipo que en breve tiempo, incluso antes de los festejos judíos de Pesaj y de los musulmanes por Ramadán, se verificará una masiva y violenta protesta por parte de sectores musulmanes que aspiran a continuar sus vidas en Jerusalén y en la franja occidental del Jordán.

Y en llamativo contraste con anteriores levantamientos ocurridos en 1987 y 1993, esta Tercera Intifada se vería alentada, directa u oblicuamente, no solo por belicosos contingentes palestinos. También por miembros del actual gabinete israelí que pretenden distraer la atención de la ciudadanía israelí.

Aludo en particular a algunos personajes – el lector recordará sus nombres – que en estos días no se limitan a adoptar agresivas actitudes y francas acciones adversas a la presencia de árabes musulmanes en la franca occidental del Jordán, incluyendo en particular el este de Jerusalén.

Un odio irrefrenable dicta estas actitudes como si el dominio de toda la Tierra Prometida fuera el nuevo mandato de las oraciones que ellos elevan al Cielo.

Por añadidura, un eventual choque armado entre israelíes y musulmanes conduciría a olvidar, al menos por algún momento, torcidas maniobras gubernamentales que en estos días pretenden la destructiva politización de la Corte Suprema y la postergación indefinida de algunos juicios que abruman a importantes figuras políticas.

Si el equilibrio psicológico y político dominara en el actual gabinete ministerial, el elocuente mensaje transmitido por los miles de ciudadanos que se citaron este lunes en Jerusalén debería conducirlos a revisar discursos y actitudes que parecen olvidar cómo y a qué precio Israel renació en este mundo.

Ciertamente, los actuales líderes de las fuerzas armadas del país no comparten ni apoyan deseos de algunos ministros y parlamentarios. Pero si la Intifada explota no dudarán en revelar firme y acertada resistencia.

Y una vez más los relatos y juicios sobre cómo y por qué la violencia y la muerte se conocieron en estas particulares circunstancias serán temas de futuros historiadores.

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