Enlace Judío.- Según los informes, veinticinco exjefes y comandantes de policía escribieron al primer ministro Benjamin Netanyahu para advertirle que las políticas del ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, conducirán a una tercera intifada o levantamiento palestino, informó The Times of Israel.
Según un informe de noticias del Canal 12 del martes, los ex altos oficiales de policía están preocupados por la demanda de Ben Gvir de continuar con la demolición de viviendas palestinas construidas ilegalmente en Jerusalén Este durante el mes sagrado musulmán del Ramadán, que comenzará a fines del mes.
La carta decía que, de hecho, se deben hacer esfuerzos para reducir la actividad durante el Ramadán, como en años anteriores, en un intento por calmar las tensiones, y señaló que el sentimiento fue compartido por varios oficiales de policía de alto rango en servicio.
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El mes sagrado musulmán se ha convertido en los últimos años en un momento de mayor tensión y violencia en Israel, Judea y Samaria y Gaza. Tales demoliciones a menudo desencadenan enfrentamientos entre los residentes y las fuerzas de seguridad en barrios polvorín en Jerusalén Este.
La red no hizo públicos los nombres de ninguno de los firmantes de la carta, que incluye a excomandantes regionales de Jerusalén, pero señaló que el grupo había decidido unirse a las protestas masivas semanales contra la controvertida reforma judicial del gobierno bajo el lema de “salvar a la policía de Ben Gvir”.
Y aunque el informe se centró en las demoliciones de casas, según los informes, Ben Gvir también se ha enfrentado con la policía en las últimas semanas por otras medidas punitivas contra los palestinos, como la degradación de las condiciones de los presos de seguridad o la promoción de una amplia operación policial en Jerusalén Este.
Ben Gvir le ha dicho a la policía que tome medidas enérgicas contra los manifestantes antigubernamentales, enfatizando que, como ministro de seguridad nacional, tiene la última palabra sobre las operaciones policiales.
El ministro respondió al informe afirmando que algunos de los que hablaron en su contra habían “destruido la fuerza policial y la habían politizado”.
Ben Gvir, del partido de extrema derecha Otzmá Yehudit, tiene un historial de provocaciones, particularmente en Jerusalén Este, donde es un visitante frecuente en tiempos de mayor fricción y ha sido acusado de exacerbar las tensiones.
El ministro ultranacionalista ha prometido adoptar una postura más agresiva contra las viviendas palestinas que se construyeron sin los permisos necesarios de Israel en Jerusalén Este y Judea y Samaria. Ha enmarcado la demolición de tales estructuras como parte de los esfuerzos de Israel para combatir el terrorismo palestino, a pesar de que no ha habido relación entre los propietarios de las casas arrasadas por falta de permisos en los últimos meses y delitos contra la seguridad.
Los palestinos dicen que se ven obligados a construir estructuras no autorizadas porque es casi imposible recibir permisos para la construcción, ya que la municipalidad aparentemente no avanza en la expansión de los barrios palestinos.
La Oficina de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) señaló en un informe de abril de 2019 que en Jerusalén Este “un régimen de planificación restrictivo aplicado por Israel hace que sea prácticamente imposible para los palestinos obtener permisos de construcción”.
OCHA dice que solo el 13 por ciento de Jerusalén Este está designado para la construcción palestina, gran parte del cual ya está construido, mientras que el 35 por ciento se ha asignado para la construcción a los israelíes. Israel dice que la Municipalidad de Jerusalén avanza y aprueba los permisos de construcción para los palestinos en Jerusalén Este a un ritmo similar al de los barrios judíos de la capital.
Según los informes, Ben Gvir se ha enfrentado tanto con Netanyahu como con el comisionado de policía de Israel, Kobi Shabtai, por su demanda de intensificar las demoliciones de casas. Según los informes, el primer ministro le pidió al ministro de extrema derecha que mostrara moderación, por temor a una reacción internacional si se llevaran a cabo demoliciones de alto perfil.
El mes pasado, Netanyahu ordenó suspender la demolición de un edificio de cuatro pisos y 12 apartamentos que alberga a unos 100 palestinos. El edificio se construyó sin permiso en 2014 y Ben Gvir había estado presionando para ejecutar una orden judicial para demolerlo.
Ben Gvir, que tiene múltiples condenas por apoyar a un grupo terrorista judío y por incitar al racismo, presionó para ampliar los poderes como parte de las negociaciones de coalición para su Ministerio de Seguridad Nacional.
El año pasado, el gobierno entrante aprobó una ley para definir la subordinación de la Policía de Israel al gobierno y convirtió en ley el entendimiento de que el ministro de seguridad nacional puede establecer la política general de la fuerza.
