El gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu está bajo una intensa presión de responder con fuerza a los ataques contra Israel desde la Franja de Gaza que han tenido lugar este martes, informó The Times of Israel.
Gran parte de la presión provino del propio gobierno de Netanyahu, ya que las tasas de aprobación del bloque de derecha han disminuido desde que regresó al poder hace cuatro meses, prometiendo restaurar la seguridad, solo para encontrarse con atentados y múltiples frentes.
“El Ramadán ha terminado. Se acabaron las excusas. Ya no hay ninguna razón para la moderación. Ahora es el momento de atacar con dureza a quienes buscan hacernos daño”, tuiteó el diputado del Likud, Danny Danon, en referencia a la estrategia del gobierno durante el mes anterior, en el que tomó medidas para reducir las tensiones durante el mes sagrado islámico.
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Almog Cohen, del partido Otzma Yehudit, adoptó un tono similar. “Se acabaron las excusas. ¡Es hora de una respuesta aplastante y dolorosa!”, tuiteó.
El sitio de noticias de Walla! citó “fuentes cercanas al ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir”, que dijeron que “la política de contención se ha agotado. Esta vez tiene que haber una respuesta inequívoca y decisiva”.
Fuentes de seguridad anónimas citadas por los medios hebreos el martes por la noche dijeron que es probable que el gabinete responda el martes por la noche o el miércoles por la madrugada.
Las FDI han respondido a la mayoría de los ataques con cohetes desde Gaza en los últimos cuatro meses, pero el gobierno se ha visto obligado a hacer más, dada la retórica de línea dura que sus miembros habían usado mientras estaban en la oposición y durante la campaña electoral.
Múltiples cohetes han sido disparados desde Gaza hacia Israel luego de la muerte del miembro de Jader Adnan, un alto oficial de la Yihad Islámica Palestina.
El ejército israelí hasta ahora ha respondido con fuego de tanques en varios sitios militares pertenecientes al grupo terrorista Hamás, que gobierna Gaza.
Netanyahu ha realizado una evaluación de la situación con los jefes de seguridad, aunque Ben Gvir no fue invitado a participar a pesar de sus solicitudes para hacerlo, según la cadena Kan.
Después de concluir su propia evaluación de la situación con el Jefe de Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi, el Ministro de Defensa, Yoav Gallant, dijo en un comunicado: “Cualquiera que intente dañar a los ciudadanos de Israel se arrepentirá”.
Mientras el ejército se preparaba para su respuesta, el gobierno recibió el apoyo de la oposición, y el jefe de este último bloque, Yair Lapid, tuiteó que “respaldaría al gobierno en cualquier acción militar que brinde tranquilidad y seguridad a los residentes del sur”.
El ex primer ministro Naftali Bennett, quien dirigió el gobierno anterior junto con Lapid, tuiteó que se habían disparado más cohetes contra Israel solo en el último día que el número lanzado contra el Estado judío durante su mandato de un año como primer ministro, que fue criticado implacablemente como débil por el bloque de Netanyahu.
“El gobierno de Netanyahu ‘contuvo’ los cohetes del Líbano, Siria y Gaza, por lo que no es de extrañar que el enemigo siga disparando”, escribió.
El alcalde de Sderot, Alon Davidi, expresó su frustración con el gobierno tras el ataque con cohetes en su ciudad, acusando a los líderes de la nación de hablar in actuar, pero dejando que los grupos terroristas de Gaza dicten la situación de seguridad en el sur.
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