El rey Carlos III de Reino Unido será ungido en su coronación el 6 de mayo con un aceite especial hecho con aceitunas de Jerusalén, la capital de Israel.

El “aceite crismal” para la coronación se consagró a inicios de marzo en una ceremonia religiosa en la Iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén, uno de los sitios más sagrados del cristianismo, de acuerdo con la BBC.

Este aceite carece de material de origen animal, en un cambio en la tradición en pro de los animales.

Las versiones anteriores del aceite incluían aceite de civeta, procedente de las glándulas de pequeños mamíferos, y ámbar gris, de los intestinos de ballenas.

La crueldad con los animales para obtener este aceite y la necesidad de proteger la vida salvaje habían suscitado preocupación, por lo que al final se decidió que la fórmula del óleo sagrado para la coronación del rey Carlos no contuviera nada de origen animal.

La unción del Rey tiene ecos de un bautismo o de la ordenación en órdenes religiosas, ya que el monarca es tocado simbólicamente con óleo santo en la cabeza, el pecho y las manos.

Este momento se consideraba tan sagrado que en la coronación de Isabel II en 1953 no se permitió a las cámaras de televisión filmarlo y se ha especulado sobre si la unción se mostrará en televisión durante la coronación de Carlos.

El nuevo aceite incluye aceite de oliva perfumado con una mezcla de aceites esenciales, sésamo, rosa, jazmín, canela, neroli (aceite de flores de naranjo) y benjuí, a los que también se añade azahar.

También tiene un significado para la familia real, ya que en parte utiliza aceitunas cultivadas en el Monte de los Olivos, en el Monasterio de María Magdalena, que es donde está enterrada la abuela del Rey, la princesa Alicia.

En su mensaje de Navidad, el rey habló de su propia fe cristiana y de lo mucho que le había conmovido visitar lugares bíblicos, como el lugar de nacimiento de Jesús en Belén.

El Patriarca de Jerusalén y el arzobispo anglicano de Jerusalén fueron los encargados de consagrar el aceite en la Iglesia del Santo Sepulcro.

Justin Welby, arzobispo de Canterbury, aplaudió la decisión de usar aceite del Monte de los Olivos, un lugar a las afueras de Jerusalén con muchas conexiones bíblicas.

“Esto demuestra el profundo vínculo histórico entre la coronación, la Biblia y la Tierra Santa“, dijo el arzobispo.

Y añadió: “Desde los antiguos reyes hasta nuestros días, los monarcas han sido ungidos con aceite de este lugar sagrado”.

Los utensilios utilizados para la unción -incluida una cuchara- son escasos supervivientes de los ornamentos originales de la coronación medieval, la mayoría de los cuales fueron destruidos por orden del líder político y militar inglés Oliver Cromwell en 1649.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío