(JTA) — En lo que ambas organizaciones promocionan como un hito para los grupos religiosos sudamericanos, los líderes de la sección latinoamericana del Congreso Judío Mundial se han reunido con líderes de la Liga Mundial Musulmana.
Más de 40 miembros de los grupos de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Panamá, Perú y Venezuela, junto con tres representantes de la Liga Musulmana Mundial con sede en La Meca, Arabia Saudita, se reunieron en Buenos Aires durante dos días la semana pasada. Discutieron formas de colaborar y publicaron un “decálogo” de acuerdos, que incluye futuras programaciones interreligiosas en escuelas sudamericanas e invitaciones a miembros de cada grupo para participar en servicios festivos de la otra fe.
Entre los representantes islámicos estuvo el Imán Emerson Bukele, presidente de la comunidad islámica-hispanoamericana de El Salvador y hermano del presidente del país, Nayib Bukele.
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“Fue una reunión de las dos religiones, pero también con muchas voces diferentes, con jóvenes y adultos, hombres y mujeres, diferentes países, experiencias, por lo que es muy importante que establezcamos un decálogo de mejores prácticas”, Melody Amal Khalik. Kabalan, presidente del Instituto Islam para la Paz con sede en Buenos Aires, a la Agencia Telegráfica Judía. “Todos expresaron lo que funcionó mejor en sus comunidades y también expresaron los desafíos, y todos escribimos este decálogo para compartir y expandir las mejores experiencias”.
Otros puntos del documento incluyen promesas de practicar deportes juntos; organizar actividades para abordar problemas y tensiones comunes (incluido el Campeonato Abrahámico de Hummus); crear una serie de días culturales, que podrían incluir visitas a museos y otra programación; y luchar conjuntamente contra el discurso del odio.
“En otras latitudes, una iniciativa como esta sería considerada un milagro”, dijo Claudio Epelman, director ejecutivo del Congreso Judío Latinoamericano, brazo del Congreso Judío Mundial. “Desde América Latina estamos llevando esperanza a aquellos lugares donde un encuentro entre judíos y musulmanes es un hecho impensable”.
La Liga Mundial Musulmana es una ONG financiada por Arabia Saudita.
“Las historias que compartimos confirman hoy que somos hermanos y que cada comunidad se apoya mutuamente”, dijo Maram Alkharboosh, director de alianzas de la Liga Musulmana Mundial. “Tenemos que vivir en paz. Las diferencias son una característica y no algo malo”.
