El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, se reunió este domingo en Ramallah con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, en el primer viaje del máximo diplomático estadounidense a Judea y Samaria desde el estallido de la guerra entre Israel y Hamás, informó The Times of Israel.
Poco después de la reunión, el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller, dijo que Blinken le dijo a Abbas que los palestinos en Gaza “no deben ser desplazados por la fuerza”.
Miller también dijo que ambos también discutieron “la necesidad de detener la violencia extremista contra los palestinos” en Judea y Samaria, presumiblemente refiriéndose al rápido aumento del número de ataques recientes, algunos mortales, cometidos por extremistas israelíes.
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Según reportes, el Shin Bet ha advertido al gobierno de su preocupación por un estallido de violencia en Cisjordania si no se controla a los colonos extremistas.
A pesar del secreto y de que el Departamento de Estado de Estados Unidos se negó a confirmar el viaje hasta después de que Blinken abandonara Judea y Samaria, estallaron protestas contra su visita y el apoyo de Estados Unidos a Israel cuando se filtró la noticia de su llegada.
Ninguno de los dos habló mientras se saludaban frente a las cámaras y la reunión terminó sin declaraciones públicas. No quedó inmediatamente claro si la falta de palabras indicaba que la reunión había ido mal.
Según declaraciones difundidas por la agencia de noticias oficial de la Autoridad Palestina, Wafa, Abbas condenó lo que llamó el “genocidio” de Israel en la Franja de Gaza en medio de su guerra contra los terroristas de Hamás allí.
“No tengo palabras para describir el genocidio y la destrucción sufridos por nuestro pueblo palestino en Gaza a manos de la maquinaria de guerra de Israel, sin tener en cuenta los principios del derecho internacional”, dijo Abbas a Blinken.
También dijo que la Autoridad Palestina sólo estaría dispuesta a asumir la plena responsabilidad por la Franja de Gaza en el marco de una “solución política integral” que incluiría Judea y Samaria, Jerusalén Este y Gaza.
Abbas enfatizó que la seguridad y la paz sólo se pueden lograr poniendo fin a la ocupación de los territorios del “Estado de Palestina” y reconociendo a Jerusalén Este como su capital.
Blinken y otros funcionarios estadounidenses han estado promoviendo un esquema vago para una Gaza de posguerra que podría incluir una combinación de una Autoridad Palestina revitalizada con organizaciones internacionales y potencialmente una fuerza de mantenimiento de la paz.
La Autoridad Palestina ha evitado condenar el ataque de Hamás del 7 de octubre, en el que terroristas de Gaza arrasaron el sur de Israel, asesinando brutalmente a 1.400 personas, en su mayoría civiles, y secuestrando al menos a otras 240.
En cambio, Ramallah ha hecho pronunciamientos vagos sobre la protección de los civiles de ambos lados, al tiempo que condena duramente la ofensiva militar de Israel.
La visita de Blinken a Ramallah y se produjeron un día después de que el principal enviado estadounidense visitara Amán y Beirut.
Después de partir de Ramallah, Blinken tiene previsto viajar a Turquía para reunirse con el presidente Recep Tayyip Erdogan y otros altos funcionarios, dijo el Departamento de Estado.
El sábado, Turquía siguió el ejemplo de Jordania y anunció que había retirado a su embajador en Israel.
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