Enlace Judío México.- Los doctores Omri Emodi, cirujano craneofacial y Zach Sharony, cirujano plástico, trabajaron en Ghana en una misión organizada por Operation Smile, una organización humanitaria con sede en Estados Unidos, junto con un equipo de cirujanos y personal médico de 12 países.
“Si un niño tiene una deformidad facial, puede afectarle para comer, beber, hablar y, por supuesto, su propia imagen de sí mismo”, explicó Emodi. “Vas con una señal encima, especialmente en África. Podrías fácilmente ser un paria”.